Los niños tienen de todo y se aburren con todo. No está claro qué les gusta a esa edad o con qué van a entretenerse. Por eso, regalar un robot es una buena idea. Son versátiles, permiten horas de juego, mejoran la creatividad y ayudarán a que los más pequeños se familiaricen con las nuevas tecnologías. Pero si tienes dudas, explicamos por qué deberías elegirlo.
Alejar a los más pequeños de las nuevas tecnologías es un error en un tiempo en el que viven rodeados de ellas. Ayudar a que hagan un buen uso de las mismas y aprendan a sacarle partido, educando en su utilización, es una forma mucho más correcta de enfrentarnos a una realidad en la que todo es “smart”. Frente a la inactividad de los más pequeños frente a la tele (y el uso desaconsejado de la misma) hay muchas formas de acercarlos a las tecnologías. Y utilizar robots es una de ellas.
Por qué deberías regalar un robot
Regalar robots a los niños y niñas se ha popularizado y tienen muchas ventajas. Muchos de los modelos del mercado permiten montarlos pieza a pieza. Incluso algunos permiten diseñarlos como quieras para después empezar a programar, como es el caso de LEGO. Mejoran la motricidad y la concentración gracias a que es fundamental dominar estos campos para poder encajar piezas pequeñas y hacer que funcione. Pero no solo es importante el proceso de crearlos. También el uso dado después.
Pero también permiten que se familiaricen con la programación, que ayuden a que tomen decisiones. Lo que consiguen estos juguetes no es que los más pequeños logren programas no desde el sentido estricto de picar código delante de una pantalla, sino que ayuda a que los pequeños de la casa tomen decisiones y sean capaces de interactuar con una máquina. Como explicaba Steve Jobs en su día “programar ayuda a pensar”. Y siempre a su nivel, adaptando el juego y el contenido a su edad. Ayudan a que piensen. El uso de robots como juguetes ayudan a pensar y a encontrar soluciones. Y empezar desde pequeños ayuda a que esa dinámica se normalice y se integre en el día a día.
Al construir y jugar con un robot, los niños tienen la oportunidad de mejorar su coordinación ojo-mano y habilidades motoras finas. Manipular las piezas del robot y controlarlo a través de comandos les ayuda a desarrollar destrezas motoras y espaciales. Este tipo de juguetes ayuda a experimentar y explorar nuevas ideas. Pueden diseñar y personalizar su robot, agregarle funciones y características únicas, lo que fomenta la imaginación y la creatividad.
Aunque hay muchos tipos de robots y mucho debate en torno a su uso, hay algo en lo que coinciden todos los expertos: son recomendables siempre y cuando haya una vigilancia y participación activa por parte de un adulto que ayude a guiar y controlar.
Qué tipos de robots hay
Hay muchos tipos de robots y depende de lo que busquemos o queramos que escojamos uno u otro. Los hay que van vinculados a una pantalla: utilizamos sistemas de programación como Scratch para crear un circuito o dar unas órdenes y automáticamente el robot las hará de forma física.
Pero hay otros más sencillos y básicos para todas las edades. Juguetes para niños con menos destreza, de seis o siete años, que pueden usar a través de tarjetas o botones como la gama de programación de la marca Learning resources en el que iremos creando recorridos para diferentes animales haciendo que giren, den la vuelta, etc. Están pensados para edades comprendidas entre siete u ocho años, pero depende de cada uno, de sus gustos y de lo que sean capaces de hacer.
Para niños y niñas de nueve o diez años podemos comprar otros juguetes y kits de robótica totalmente recomendados. La gama Mindstorms de LEGO permite que construyan sus propios robots y androides y luego pueden controlarlos, mejorarlos, etc.
Sea cual sea la edad del niño o la niña y lo que tú busques, hay algún robot interesante que podemos regalar y que le aportará muchas ventajas y aprendizajes.
Cómo elegir y qué robot comprar
¿Cómo escogemos cuál es el más adecuado y el que mejor se adapta al niño o la niña que lo va a recibir? Teniendo en cuenta una serie de aspectos fundamentales que nos ayudarán a escoger bien…
- La edad: Que sea adecuado para su edad es importante para que le resulte llamativo y práctico, pero sin que se frustre por no saber utilizarlo. Dependerá del niño en concreto, pero debemos fijarnos en la edad recomendada del juguete.
- Construir o no: Los hay que ya vienen montados, pero hay otros robots que debemos construir. Dependerá de sus habilidades o sus gustos si quiere construir sus propios robots o simplemente jugar con ellos.
- Temática: Hay tantos modelos en el mercado que podemos elegir la temática que más guste a la persona que lo va a recibir. Hay robots de dinosaurios, por ejemplo. O robots con forma de unicornio. Robots adorables con aspecto humanoide y otros mucho más serios. También de sagas o películas conocidas como Star Wars, por ejemplo.
- Pantallas o no: Tenemos que decidir si queremos que el robot vaya vinculado a una pantalla o que su uso sea independiente. Dependerá de si queremos que e niño o la niña pase tiempo con la tablet o con el teléfono o consideramos que mejor alejarlos de ellas.
Robots recomendables
Aunque dependerá de los gustos y de todos estos criterios, hay algunos modelos que podemos tener en cuenta y que son una excelente opción para regalar.
Super Doc de Clementoni a partir de cinco años y que podemos controlar con tarjetas incluidas en el juego. Puede programarse libremente o usando las cartas incluidas. Está indicado para los más pequeños y es una opción entretenida y muy básica para empezar a familiarizarse con la programación. Lo hace a través de diferentes personajes que podemos mover por el tablero y todo tipo de acciones entre las que podemos escoger. Una gran ventaja es que no hace falta usar teléfonos ni tabletas así que los más pequeños podrán utilizarlo por sí solos.
Cyber Talk de Clementoni y Evolution Robot. Clementoni también tiene modelos para niños más grandes y pensados a partir de unos ocho años, aproximadamente. Enfocados desde el ámbito STEM permiten que los pequeños monten el robot al completo y añadan todo tipo de partes: motores eléctricos, sistemas, piezas… Una vez que esté montado, puede utilizarse para bailar o para moverse. Esto les ayudará a pasar un buen rato construyendo pero también programando el juguete. Puede controlarse desde una tableta o un teléfono móvil y hay varios modelos disponibles.
Básicos y fáciles de usar son los MagiCoders de Learning Ressources. Un unicornio, un dinosaurio, un dragón y otros animalitos disponibles. Todos ellos tienen un diseño diferente pero una misma idea: podemos ir dando órdenes a través de tarjetas que funcionan como comandos y a través de las cuales irán haciendo recorridos.
El kit de construcción de robots Makeblock ha sido diseñado con el propósito de enseñar a los niños la programación de robots de forma sencilla y entretenida. Este conjunto de robótica STEM es un excelente punto de partida para aquellos interesados en aprender sobre ingeniería, robótica y programación. A través de la construcción y el juego con este robot, los peques de la casa podrán mejorar habilidades como la coordinación entre la vista y las manos, la concentración, el pensamiento lógico y la creatividad.