La empresa canadiense de telefonía móvil vive una situación complicada. Los inversores le han castigado por sus pobres resultados lo cual podría provocar cambios estructurales muy importantes. ¿Tiene futuro BlackBerry apostando en solitario por su sistema operativo?
El valor en bolsa de una compañía es un buen termómetro de su situación financiera y sobre todo estratégica. En el caso de BlackBerry, las acciones se han desplomado un cerca de un 20% este mismo año a pesar del lanzamiento de sus nuevos terminales y de la presentación de BB10 como sistema operativo. El tema es que llueve sobre mojado lo que significa que el valor de la empresa ha pasado de 84.000 millones a 4.800 en cinco años, de hecho este precio de saldo podría provocar que cualquier gigante se hiciera con la compañía sin demasiado esfuerzo.
Salida de la bolsa y cambio de rumbo
Según la agencia de noticias Reuters, los directivos de BlackBerry podrían estar planteando la posibilidad de salir de la bolsa para escapar de la tormenta financiera y así poder llevar a cabo cambios importantes. Oficialmente no hay nada y de hecho no es sencillo ya que podría dañar muchísimo a la imagen de la maltrecha firma.
Soluciones
A pesar de que el nuevo sistema BB10 funciona correctamente y proporciona una experiencia de usuario muy adecuada no ha logrado calar entre los usuarios. El alto precio de la Z10 y la competencia de sus rivales ha llevado a BlackBerry a perder la tercera posición en favor de Windows Phone. Por si fuera poco, caminar en solitario en un mercado dominado con claridad por Android e iOS no parece una buena idea.
¿Alternativas?
Quizás lo más sensato para BlackBerry sería pensar en Android. Sería un fracaso para el actual Consejero Delegado y para muchos inversores que han apostado por la firma canadiense, pero a medio y largo plazo sería un bálsamo importante. La posibilidad de que BlackBerry licencie su sistema para que otro fabricante lo utilice es del todo improbable.
La historia ha demostrado que en telefonía móvil un año puedes estar en la cima más alta y al año siguiente puedes estar en la ladera. Éste es el caso de los canadienses, no se han sabido adaptar, han ignorado por completo al marketing (como HTC cuando le iban bien las cosas) y ahora tiene una dura travesía en el desierto que esperamos que sean capaces de superar.