La conexión mínima de 1 Mbps en toda España le cuesta a Telefónica 13 millones al año
El otro día conocemos que evitar el cierre de las cabinas en 2019 es una ruina ya que cada vez cuesta más mantenerlas. Como sabemos, el Consejo de Ministros no atendió a las recomendaciones de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, CNMC por sus siglas, de suprimir este concepto del servicio universal. Hoy, conocemos otro aspecto importante de ese servicio universal, aunque en este caso con más sentido. Concretamente, sabemos que ofrecer una conexión mínima de 1 Mbps en toda España le cuesta a Telefónica 13 millones al año.
El servicio universal recogido dentro de la Ley General de Telecomunicaciones, garantiza el derecho de conexión a la red pública desde “una ubicación fija que permita el acceso funcional a Internet y al servicio telefónico disponible al público”, el derecho a disponer de guías y servicios de consultas de abonados, los teléfonos públicos de pago, las tarifas y condiciones especiales para usuarios con discapacidades y con necesidades específicas y, finalmente, la gratuidad de las llamadas a los servicios de emergencia, además del servicio de consulta telefónica sobre números de abonado.
La conexión mínima de 1 Mbps en toda España: 13 millones para Telefónica
Se ha eliminado ya el concepto de “el derecho a disponer de guías y servicios de consultas de abonados” pero no el de “los teléfonos públicos de pago”. El coste en 2016 de este último fue 10 veces superior que el que pagamos en 2012 y dejará de aumentar en los ejercicios 2017, 2018 y 2019.
Sin embargo, hoy conocemos el coste del resto de conceptos del servicio universal. En este caso, el coste neto por ofrecer una conexión fija de 1 Mbps en zonas no rentables es de 13,8 millones de euros. Es decir, Telefónica debe desembolsar esa cantidad con respecto al ejercicio 2016 para asegurar la prestación de la conexión a la red desde una ubicación fija, el servicio telefónico y la conectividad a Internet a 1 Mb/s en zonas no rentables.
Otros conceptos destacados que se llevan parte del presupuesto son los costes netos derivados de usuarios con tarifas especiales, principalmente el bono social. Una vez eliminados los beneficios no monetarios, vemos que el coste neto del servicio universal quitando las cabinas fue de 12,3 millones de euros.