Microsoft sorprendió a todos con el anuncio de Windows y no precisamente por no estar esperando un nuevo sistema operativo. El nuevo Windows se salta el 9 para ofrecer una filosofía renovada de un mismo software para varias clases de dispositivos. Analizamos lo mejor (de lo que se conoce) de Windows 10.
Aunque no se conocen todas las novedades que llegarán con el nuevo Windows 10, la realidad es que con lo que sabemos ya nos podemos hacer una idea de lo mejor y lo peor de este sistema operativo. Los usuarios ya pueden probar esta nueva versión del sistema operativo de los de Redmond, descargándola directamente dentro del programa Windows Insider. Gracias a esto, los usuarios podrán formarse una impresión en primera persona de lo que veremos a finales de 2015.
El nuevo Windows 10 llega con algunas novedades destacadas y algunas carencias que no han sido mejoradas por Microsoft. En este artículo vamos a centrarnos en lo que para nosotros es lo mejor de este sistema, del que podéis conocer todas las novedades en este enlace y sus requisitos mínimos en este otro.
El regreso del botón Inicio
Era lo más deseado por los usuarios y por fin volverá a estar disponible. Windows 10 recupera el menú de inicio, disponible desde Windows 95 y que inexplicablemente desapareció con la llegada de Windows 8. Tal era la necesidad de los usuarios de contar con esa función, que aparecieron multitud de programas para introducirla en este sistema operativo.
Windows 10 contará con un menú de inicio que introduce varias mejoras e intentará ser aún más útil que el que encontrábamos en Windows 7, la última versión con esta característica. Las live tiles se podrán anclar a este menú, mostrando información en tiempo real y con la posibilidad de ordenarlas a nuestro gusto. Además, el menú se podrá redimensionar según nuestras necesidades.
El teclado y el ratón vuelven a ser protagonistas
Con la llegada de Windows 10, los usuarios “de teclado y ratón” vuelven a ganar protagonismo. La anterior versión, Windows 8, pecó de introducir una nueva interfaz optimizada para el uso táctil de manera bastante agresiva. Aún recuerdo lo complicado que era apagar el pc en la primera versión de Windows 8, convirtiéndose en una opción bastante escondida.
Windows 10 devuelve el protagonismo a los usuarios tradicionales e incorpora un escritorio mejorado con nuevas funciones. La interfaz metro, cuando utilicemos el equipo con teclado y ratón, quedará relegada a la mínima expresión. Los múltiples escritorios, una característica presenta en multitud de distribuciones Linux o el uso de varias ventanas de forma simultánea, son dos características que mejoran la experiencia con respecto a versiones anteriores. Las aplicaciones con interfaz Modern se verán dentro de una ventana, como cualquier otra aplicación de Windows, cuando manejemos el equipo de forma tradicional. Será posible redimensionarlas o minimizarlas sin problemas.
Interfaz táctil
Lo táctil sigue presenta en Windows 10, pero ahora se incorpora una función realmente interesante denominada Continuum. Imaginad que estamos utilizando un portátil convertible con teclado y ratón. Al estar el teclado y el ratón conectados, la interfaz será la tradicional como menú de inicio y aplicaciones en ventanas. Lo novedoso viene a la hora de desconectar la pantalla del teclado, donde Windows 10 nos preguntará si queremos pasar a modo táctil. Al activar la interfaz táctil, el inicio volverá a ser una pantalla como Windows 8 y las aplicaciones se verán a pantalla completa. Nada mejor que un vídeo para ver que os hablamos:
Multiplataforma
Windows 10 inaugura una nueva filosofía dentro del sistema de Microsoft: One product family, One plataform, One store. Windows 10 funcionará y se adaptará a móviles, tabletas, convertibles, portátiles, sobremesas y Xbox One. Todavía no se han dado detalles sobre cómo funcionará todo esto. El hecho de ser multiplataforma podemos interpretarlo como algo bueno o malo, en esta ocasión nos centraremos en ver lo que aporta como ventaja.
La idea de simplificar el uso del sistema operativo, haciéndolo compatible con varios tipos de dispositivos es realmente atractiva. El hecho de que todos los dispositivos compartan el mismo código, aunque con funciones diferentes, facilitará el mantenimiento, sobre todo en el entorno empresarial. Un único Windows para todos nos lleva directamente al siguiente apartado: Aplicaciones universales.
Aplicaciones universales
Siguiendo con el apartado anterior, el hecho de que Windows 10 funcione para varios tipos de dispositivos, hace que las aplicaciones universales cobren especial importancia. Los desarrolladores solo tendrán que programar una aplicación que funcionará en todos los dispositivos Windows. Esperamos más detalles por parte de Microsoft para analizar las ventajas de esta novedad.
Requisitos mínimos
Para alegría de todos los usuarios, los requisitos mínimos serán los mismos que en Windows 8. Un procesador de 1 GHz, 1 giga de RAM para sistemas de 32 bits o 2 gigas para sistemas de 64 bits, 20 gigas de disco duro y tarjeta gráfica compatible con DirectX 9, es decir, unos requisitos muy asequibles para propiciar la llegada del nuevo sistema a todos los usuarios, principalmente a los que se resisten a abandonar versiones más antiguas.
Versiones preliminares para todos
Finalizamos con una de las cosas que más ha gustado, más allá de las novedades propiamente dichas. El nuevo Windows 10 podrá ser probado por todos los usuarios, previo registro en el programa Windows Insider. De esta forma, Microsoft se abre al gran público y acepta gustosamente las críticas y sugerencias
Estos son para nosotros los puntos más destacados del nuevo Windows 10. Mañana publicaremos otro artículo con lo peor del nuevo sistema operativo de los de Redmond, que también tiene algunas sombras que no terminan de convencer a los usuarios. Para vosotros ¿Qué es lo mejor y lo peor de Windows 10?