Meltdown y Spectre, las dos graves vulnerabilidades de las CPUs destapadas esta pasada semana, han dado la voz de alarma a los usuarios de dispositivos de escritorio, portátiles y móviles porque están afectadas CPUs de Intel, AMD y ARM. Es decir, ordenadores con Windows y macOS, pero también terminales móviles con Android y iOS. No obstante, firmas como Qualcomm no han comunicado cuáles de sus chipsets están afectados. Y se sospecha que el Snapdragon 845 podría ser vulnerable.
Mientras Apple ha confirmado que sus dispositivos iOS –iPhone y iPad- están afectados por las vulnerabilidades de las CPUs, desde Qualcomm han confirmado que están trabajando en la solución en forma de parche de software, pero no han confirmado cuáles son los modelos de chipset que se han visto afectados por el problema de seguridad. Sí, los procesadores ARM son vulnerables, pero en el caso de este fabricante no sabemos cuáles, y se sospecha que el Snapdragon 845 está en la lista, y que podría producir retrasos en el lanzamiento de los nuevos teléfonos inteligentes que están previsto que cuenten con este chipset; entre ellos, el Samsung Galaxy S9.
El Snapdragon 845, Meltdown y Spectre ¿retrasos en los gama alta de 2018?
Un portavoz de Qualcomm ha señalado que se está trabajando en las medidas de mitigación como respuesta a las vulnerabilidades –Meltdown y Spectre- que afectan a sus productos, y que se sigue trabajando por fortalecer su seguridad en la medida de lo posible. El proceso de implementación de estas medidas de seguridad ha arrancado, y desde la compañía animan a los usuarios a aplicar la actualización de seguridad sobre sus dispositivos tan pronto como esté disponible el parche de actualización. Pero en estas declaraciones no aclaran si el Snapdragon 845 se ha visto afectado, y si esto repercutirá en la disponibilidad de los nuevos teléfonos inteligentes.
Por lo tanto, queda en el aire que los nuevos móviles con Snapdragon 845 vayan a estar listos para sus fechas previstas, y que vaya a llegar para ellos un parche de seguridad en contra de Meltdown y Spectre. En el caso del Samsung Galaxy S9, que se espera sea el primero con Snapdragon 845, su posible retraso no afectaría a España si la compañía surcoreana vuelve a combinarlo con el Exynos 9810 como en años anteriores. Aquí, la compañía suele utilizar su propio chipset.