Aunque iOS 11 llegó el pasado mes de septiembre, la firma de Cupertino está ya trabajando en iOS 12. Antes que este nuevo sistema operativo llegará iOS 11.3 con cambios como el control de salud de la batería, por ejemplo. Pero en el WWDC ya tendremos la primera beta de iOS 12, que según las costumbres de Apple debería traer grandes cambios. ¿Será así? Según la filtración más reciente, Apple habría retrasado una buena parte de sus novedades para un año más tarde.
Aunque con cada nueva versión de iOS se introducen algunas modificaciones, iOS 7 fue el gran cambio para el ecosistema de Apple y desde entonces hemos visto una evolución continuista. Dentro de iOS 11, como en versiones anteriores, cada actualización ha sido una pequeña revisión. Sólo iOS 11.3 traerá grandes cambios, y como consecuencia de la ralentización de los iPhone. En realidad, las modificaciones más importantes para esta versión estarán en la solución de un grave problema por parte de la firma de Cupertino. Si bien iOS 12 debería traer grandes cambios, no habrá tantos como debiera.
Los ‘grandes cambios’ previstos para iOS 12 llegarán un año más tarde
Si con iOS 11 uno de los cambios más destacables ha sido la introducción de la realidad aumentada, con iOS 12 no sabemos aún qué nos depara. Sabemos únicamente que el ‘salto’ de versión debería ser importante; y esta filtración ha destapado que no habrá tantos cambios como Apple tenía previsto. ¿A cuáles se refieren? No lo sabemos aún, conocemos únicamente la orden de Apple a sus empleados, con una supuesta revisión en profundidad de las nuevas funciones sobre las que están trabajando. En esta revisión, las novedades se habrían reducido.
No es que se hayan descartado cambios de iOS 12, sino que sencillamente algunos de ellos se han retrasado hasta 2019. Y tampoco sabemos si eso quiere decir que llegarán con una actualización de iOS 12, o si bien están planeando dejarlos para iOS 13. Sea como fuere, desde el WWDC 2018 tendremos betas de iOS 12, y la versión final, estable y pública se podrá instalar en septiembre de 2018 con el estreno de los nuevos iPhone.
Todo esto, según explican, estaría motivado por la intención de Apple de centrarse en el rendimiento y la calidad de su sistema operativo, más allá de abordar nuevas funciones y características.