Los microdrones militares que pueden batir sus alas y cambiar su recorrido en pleno vuelo podrían llegar pronto en un futuro en el campo de batalla. A partir de una patente firmada en 2014 para crear alas para aviones no tripulados, el laboratorio de investigación de élite de la Fuerza Aérea de Estados Unidos está trabajando con la empresa Airion Health LLC para crear un prototipo de un mini vehículo aéreo que puede imitar el vuelo de insectos o aves y que, además, tiene la capacidad de cambiar la velocidad sin el apoyo de un ordenador de alta potencia. Cada vez es más común la aparición de los drones en el ámbito militar.
Esta clase de microdrones podrían usarse para tareas de vigilancia en el campo de batalla o sobre bases militares. También, para marcar objetivos antes de que los aliados u otras aeronaves lleguen al campo de batalla. El desarrollo de estos diminutos drones se ha convertido en un foco importante para el Departamento de Defensa, ya que planea un conflicto futuro con un competidor cercano.
Una patente que pronto verá la luz
Junto con el Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea, Airion, una empresa especializada que crea prototipos innovadores y rápidos tanto para la industria privada como para el ejército de Estados Unidos, desarrollará un microvehículo aéreo viable a principios de 2022, según un comunicado. El servicio firmó un acuerdo de licencia de patente no exclusiva con Airion para la licencia de la invención propiedad del gobierno en enero. Los otros productos que desarrolla esta empresa son sistemas respiratorios y de ventilación junto a tecnologías avanzadas de absorción de humedad para combatientes.
Los drones serán controlados a distancia, según funcionarios de la Fuerza Aérea, lo que le dará la capacidad de cambiar de ruta según las necesidades. Según la patente, el servicio busca un dron que tenga solo dos características: que permitan el movimiento mecánico a la vez que ofrezca seis grados de vuelo distintos, lo que significa que puede cambiar de posición hacia adelante o hacia atrás, arriba o abajo, izquierda o derecha.
La mayor ventaja, su tamaño
Desde un punto de vista comercial, estos drones pueden maniobrar en espacios pequeños y estrechos como túneles o en maquinaria más grande para su inspección. La Oficina de Investigación y Aplicaciones de Tecnología en la Base de la Fuerza Aérea Wright-Patterson en Dayton, Ohio, también ha colaborado en el desarrollo de estos pequeños drones ya que este organismo cuenta con un laboratorio de investigación.
El pasado febrero el servicio hizo una solicitud de robots que fueran portátiles y que pudieran tirarse a una habitación o a un área abierta y detectar si hay personas alrededor. Aunque aún no han sido desvelados las dimensiones ni el peso de estos drones, no es la primera vez que Estados Unidos invierte en estas pequeñas aeronaves. El año pasado, la Base de la Fuerza Aérea Eglin en Florida comenzó a usar robots del tamaño de una pelota de fútbol que se podían lanzar para entrenamiento de seguridad.
Aun así, se aproxima que cada dispositivo pesaría aproximadamente una libra, lo suficientemente ligero como para que las tropas pudieran arrojarlo a una habitación y luego controlarlo con un dispositivo de mano.