No hay duda de que las tarifas móviles de contrato son un plus que muchos clientes prefieren. Ya sea por tener datos ilimitados o porque creen que siempre es la mejor alternativa. Sin embargo, hay varios motivos por los que cada vez más usuarios se decantan por un plan de prepago. Por esto mismo, es el momento de ver cuáles son las ventajas que hay detrás de este tipo de tarifas. Y todo porque el ahorro no es el único beneficio que se debe tener en cuenta.
Ya sea para tu línea móvil principal o para otras líneas secundarias, el simple hecho de tener una tarifa de prepago te da una serie de ventajas. Pero, ¿qué motivos te pueden hacer cambiar de un plan a otro? Está claro que dependerá de las necesidades de cada uno. En cualquier caso, vamos a hablar de los motivos más frecuentes por los que muchos usuarios se pasan de contrato a prepago.
Por qué cambiar a prepago
No siempre te podrá interesar pasarte a este tipo de tarifa. Sin embargo, si se cumplen alguna de las siguientes condiciones, es el momento de plantearte si es buena idea cambiarte a prepago.
Analizamos las 3 ventajas clave del prepago (ahorro, control y flexibilidad):
Pagarás menos
En general, este tipo de tarifas son más baratas. Desde 5 euros al mes tienes la oportunidad de tener un plan móvil para tu línea con llamadas ilimitadas y un bono de GB limitado. Y, por lo general, suelen tener una duración de 28 días, como ocurre en Movistar, Orange o Vodafone. Sin embargo, hay operadores como Simyo o Digi que te permiten hasta 30 días.
En cualquier caso, el ahorro es significativo por el precio que pagarás cada mes. Especialmente si eres de este tipo de cliente que apenas usa los datos móviles, ya que está continuamente conectado a una red WiFi.
Sin sorpresas en la factura
Otro de los beneficios de tener este tipo de tarifas es que te puedes olvidar de pagar de más. Pagas una cantidad fija para tener acceso a una cantidad de datos móviles y una serie de minutos todos los meses. Por lo que la operadora no te podrá hacer cargos ocultos. Es decir, que te evitas tener que hacer frente algún cobro adicional. En general, como cliente, lo cierto es que tendrás bajo control todos los gastos.
Elegir otro plan será más sencillo
Si en algún momento quieres una tarifa prepago con más gigas, podrás cambiar de plan fácilmente. Y lo mismo sucede si un mes quieres pagar menos y disfrutar de menos GB móviles. Una vez que pase el periodo de 28 o 30 días, podrás elegir recargar tu SIM con otro de los diferentes planes que tiene ese operador u otro. Y es que notarás que la portabilidad será más sencilla que nunca.
¿Tiene desventajas?
Como todo, también hay una serie de contras. Por ejemplo, hay que recargar el saldo. La inactividad de la línea puede provocar que las pierdas de forma definitiva. Y también es importante tener en cuenta que, si consumes muchos datos, el coste unitario por GB o minutos puede ser superior al de un plan de contrato. Eso sí, en función de la tarifa prepago que hayas elegido. Por último, la mayor parte de operadores tienen servicios como VoLTE o VoWiFi que únicamente se ofrecen en contrato.
Cuándo es mejor una tarifa de contrato
Sin embargo, está claro que este tipo de planes no son para todo el mundo. Si eres un cliente que busca una mayor versatilidad a la hora de cambiar de tarifa y no eres de gastar una gran cantidad de GB al mes. Entonces este tipo de planes son para ti.
En cambio, si usas muchos datos o minutos, las tarifas de contrato suelen tener mejores opciones. Además, una de las ventajas de estas tarifas es que puedes optar a conseguir móviles a plazos en diferentes operadores o hasta tener acceso a streaming o televisión. En definitiva, dependerá de las necesidades de cada usuario. Por lo que siempre hay que valorar esta serie de aspectos antes de cambiar de tarifa.
