Siempre que contrates Internet con un operador, podrás recibir en tu casa un nuevo router que nos permita conectarnos a Internet. El técnico se desplazará, generalmente, hasta tu casa. Y será el encargado de hacer la instalación. Pero, ¿podemos pedir al operador que nos cambie el router? ¿En qué casos podemos hacerlo? Si quieres tener uno nuevo puedes comprar uno tú mismo y cambiarlo, pero también podemos hablar con nuestra compañía para que nos mande otro.
Desde el momento en el que firmamos el alta o una portabilidad con un operador, automáticamente se ponen en marcha una serie de movimientos que desencadenan, en la mayoría de las ocasiones, en la instalación de un nuevo router. No obstante, son muchos los motivos que pueden llevarnos, pasado un tiempo, a preguntarnos si es posible cambiar nuestro router por cualquier otro modelo.
Es importante tener en cuenta que no podemos hacerlo porque sí, sino que hay casos en los que podremos pedir que nos cambien el que ya tenemos, que nos manden uno nuevo. A continuación, te contamos los principales.
Disposición de velocidad
¿Qué significa esto? Que podemos solicitar un router nuevo si contratamos una mayor velocidad y nuestro aparato no es compatible. Si vamos a contratar 1 Gb de velocidad, pero tenemos un router que solo es compatible con 500 Mb no podremos utilizarlo. En este caso, podemos pedir un nuevo aparato a nuestro operador para que sea compatible con esta velocidad superior.
Es posible que te ofrezcan enviar un nuevo router a tu domicilio o que un técnico venga a tu casa para realizar la instalación y configuración necesarias. Si optas por recibir el nuevo router por correo, el comercial te proporcionará información sobre el envío y los pasos a seguir para la instalación.
Si eliges que un técnico realice los cambios necesarios en tu casa, el comercial programará una cita para que el técnico visite tu domicilio y realice la instalación del nuevo router.
Si no es compatible
Como es lógico, si nos envían un router incompatible con nuestra fibra… Podemos pedir que nos manden otro. De hecho, será necesario para que funcione. Aunque esto ocurre en muy pocos casos, pero puede darse. Imagina, por ejemplo, que contratas Internet y te envían el router por Correos. Te mandan un router para fibra indirecta, pero tú tienes fibra directa. ¿Qué pasa? Que no puedes conectar el cable sin tener una ONT, pero tampoco tienes una ONT.
En estos casos, debemos solicitar que nos manden otro para poder conectarlo y poder conectarnos a Internet, un router donde sí podamos enchufar el cable de fibra.
Router defectuoso o roto
Si se te ha roto el router, como es lógico, puedes pedir que te manden otro. No necesariamente tendrá que ir un técnico a instalarlo, sino que puede que simplemente recibas por Correos un nuevo aparato que debas conectar y enchufar. Aunque puede que el proceso normal sea que alguien acuda a tu domicilio para ver por qué falla, por qué no funciona y qué se puede hacer.
En caso de que tu router se rompa no tendrás que pagar nada, en la mayoría de los casos. En caso de avería de Internet o de si nuestro router no funciona es poco probable que nos cobren por el cambio, pero dependerá de qué haya pasado. Si es claro que has dado un martillazo al router y hay que cambiarlo, como es lógico, es probable que te reclamen ya que se trata de un aparato en cesión y que no te pertenece. Es decir, debes devolverlo al tramitar la baja.
Un nuevo router
Si tienes un router muy antiguo y tienes contratada una tarifa con un operador que ha lanzado un modelo más avanzado y nuevo, podemos pedir que nos lo instalen. Si vemos que hay un nuevo modelo, podemos reclamarlo o pedir que nos sustituyan el nuestro si está obsoleto.
En función de la compañía y del router en sí, es probable que tengamos que pagar un suplemento por tenerlo o que simplemente nos manden uno nuevo. Es el caso del router más avanzado de Vodafone, por ejemplo, que nos obliga a pagar un precio adicional de tres euros frente al uso de otros que instala la compañía.
¿Cuándo no van a cambiarme el router?
A veces, el servicio de Internet no funciona como deseamos. Se producen cortes o el WiFi no funciona como debería y llamamos a atención al cliente para solicitar la asistencia de un técnico esperando que nos cambien el router. Debes saber que la solución no siempre es sustituir el equipo por uno nuevo. Los problemas en el servicio pueden deberse a muchos factores a lo largo de la red y será el técnico, quien determine, si es necesario cambiar el router, realizar una modificación en el cableado de fibra o simplemente hacer una configuración en nuestro router.
En la mayoría de ocasiones, el mal funcionamiento del router se debe a un fallo en la actualización o a una configuración errónea, por lo que, un simple reinicio o un reseteo que fuerce una nueva actualización del firmware del router será suficiente.
Debes saber que, si el técnico hace las comprobaciones necesarias en el router y sus herramientas no detectan un fallo evidente, no va a ser necesario cambiar el router y dejará el que tienes instalado con una nueva configuración para solucionar la incidencia.
La recomendación de la OCU
El pasado mes de marzo de 2022, la OCU recomendaba a los consumidores solicitar el cambio de router transcurridos tres años desde su instalación. La explicación se debe, principalmente, a lo relacionado con la velocidad. Según un estudio llevado a cabo por el propio organismo, pasado este tiempo la velocidad del router original puede llegar a ser hasta cinco veces inferior en comparación con un router nuevo.
La Organización de Consumidores y Usuarios concluye que son varios los motivos que pueden llevarnos a exigir este cambio. El primero de ellos se produce en el caso de que la velocidad que tengamos contratada diste mucho de la velocidad que se recibe. Además, también deberíamos valorar el cambio cuando se sufren parones en la visualización del vídeo o mientras realizamos una videollamada. La OCU también ha solicitado, además, que los operadores estén obligados a facilitar la configuración necesaria para que el consumidor pueda instalar su propio router si así lo desea sin renunciar a ninguna funcionalidad, algo que no ocurre en el momento actual.