La Ley de Vivienda que entró en vigor en el año 2023 estableció una nueva metodología para calcular el incremento de los precios del alquiler. Este cambio surgió con motivo de la escalada que estaba recorriendo el IPC en ese momento y que, de mantenerse, podía provocar importantes tensiones en las finanzas domésticas.
En el año 2022, el Gobierno definió diferentes medidas que trataban de lidiar con los efectos que los conflictos armados que se estaban viviendo en aquella época, y que a día de hoy continúan, y que estaban provocando importantes problemas en materia económica. La batería de acciones que se aprobaron incluyeron la necesidad de desligar la subida de los alquileres con el IPC. Inicialmente, la decisión era temporal. Sin embargo, terminó por convertirse en definitiva poco tiempo después, apostando un mercado del alquiler más estable.
Esta situación provocó que el 26 de mayo de 2023 entrara en vigor la conocida como Ley de Vivienda que, entre sus diferentes novedades, contemplaba el incremento máximo que se podían realizar en los contratos de alquiler vigentes de 2024. Además de la introducción de un nuevo índice que sustituye al IPC y que tiene como objetivo evitar los incrementos desproporcionados de la renta.
Cuándo va a subir tu alquiler
Ahora que ya hemos llegado al último trimestre del año, es normal que muchos de nosotros nos preguntemos cuál es la subida máxima a la que nos vamos a tener que enfrentar con nuestro alquiler durante los próximos 12 meses. En el año 2024, la subida máxima que contemplaba la ley era del 3%. De cara al próximo 2025, es el instituto Nacional de Estadística el que debe definir el nuevo índice de referencia. El plazo para presentar dicho índice concluye el 31 de diciembre de este mismo año, por lo que todo apunta a que podremos conocerlo durante las próximas semanas.
En el momento de escribir estas líneas, el INE todavía no se ha pronunciado al respecto y no conocemos cuáles son los diferentes indicadores que se barajan para calcular los nuevos incrementos. No obstante, si tenemos en cuenta que durante este 2024 la regulación indicaba que el incremento máximo permitía subir un 3% y que este cambio se produce para aliviar el bolsillo de los inquilinos residentes en nuestro país, todo apuntaría a que el índice aplicado debería ser, en el peor de los casos, similar a esta cantidad.
Un índice más bajo y más estable que el IPC
Como ya hemos afirmado, todavía no conocemos cómo afectarán los cambios que tiene previsto el Gobierno al respecto. No obstante, como apuntan medios como Idealista, se prevé que el índice que se tome como referencia sea más estable y más bajo que el IPC actual.
El objetivo no es solo el de proteger el mercado del alquiler durante el próximo 2025, sino también proteger a los ciudadanos de vivir situaciones como las vividas durante los últimos meses como consecuencia de la escalada del IPC. Mientras el Ejecutivo comunica el indicador escogido, únicamente queda tener paciencia y esperar a que se trate de una medida favorable que logre paliar las tensiones que acostumbra a vivir el mercado de alquiler en nuestro país.