España se prepara para el futuro: así serán las pruebas de coches autónomos

España busca ser pionero en Europa en la integración segura de vehículos autónomos. Para ello, han elaborado un Programa Marco para Pruebas de Vehículos Automatizados (Programa ES-AV), que establece las normas que deberán seguir los fabricantes de automóviles que quieran realizar ensayos de coches sin pilotos dentro de la frontera española. De este modo, la Dirección General de Tráfico (DGT) demuestra su compromiso con fomentar la innovación tecnológica y la mejora de la movilidad sin descuidar la seguridad de la sociedad española.
El Programa ES-AV, publicado esta semana (el 18 de junio de 2025) por la DGT, es una iniciativa que apela a las marcas a trasladarse a España a hacer las pruebas de los coches automáticos. Quienes lo hagan tendrán que entregar informes obligatorios periódicos, de incidentes y finales. Así, la DGT podrá evaluar las pruebas y garantizar la confianza pública en este tipo de movilidad del futuro.
Según declaraciones de Juan José Arriola, subdirector adjunto de vehículos de la DGT, recogidas en la nota de prensa oficial, el objetivo de las reglas que impondrá a los fabricantes servirá para que «estas tecnologías se desarrollen de forma segura, transparente y responsable». Con la implementación del Programa ES-AV, la DGT aspira a que España será un punto clave para los ensayos de coches autónomos en Europa. Eso podría generar beneficios a la industria y a la ciudadanía, sin descuidar una movilidad segura y eficiente.

Requisitos para los ensayos en España
El marco legal impuesto por la DGT recoge tres sistemas de acceso que los fabricantes deberán cumplir con los vehículos autónomos que quieran probar en España.
Sistema de Acceso | Requisito Principal | Base de Evaluación | Documentación Clave Adicional |
---|---|---|---|
Evaluación Externa | Someterse a evaluación técnica independiente | Guía Comisión Europea o Apéndice 4 (Programa ES-AV) | Detalles del vehículo, homologación base, análisis de riesgos, sistema de paro de emergencia. |
Reconocimiento Autorización EEE | Autorización válida de un estado del Espacio Económico Europeo | Homologación o autorización del país de origen del EEE | Solicitud, datos del entorno operacional, resultados de pruebas previas. |
Acceso Especial | Demostración de métricas de seguridad real o evaluación de seguridad | Operaciones previas en EEE/terceros países, auto-declaración o autorización de tercer país (excepcional) | Información y datos de métricas de seguridad, evaluación de seguridad del vehículo. |
Sistema de evaluación externa
En primer lugar, tenemos el Sistema de evaluación externa, que exigirá someterse a una evaluación técnica independiente (ajena a la marca). El análisis podrá seguir lo establecido en la Guía de la Comisión Europea sobre las pruebas de vehículos automatizados o el procedimiento indicado en el apéndice 4 del Programa ES-AV.
El proceso del apéndice 4 del programa obliga a aportar la documentación que hace referencia al tipo de vehículo (dimensiones, masas, potencia, etc.), su homologación base, la identificación de riesgos, las funcionalidades a ensayar y aquellas para las que el vehículo no está diseñado, el sistema de paro de emergencia y otras funciones de seguridad.
Después, una tercera parte verificará que la documentación presentada por el solicitante es correcta para la realización de ensayos en carretera abierta. El siguiente paso es realizar una inspección de seguridad, que comprueba el espacio interior, el estado de las ruedas, la sujeción de instrumentación, etc. Por último, se realiza una comprobación dinámica, para verificar que el vehículo se puede conducir de forma manual y se puede retomar el control por si la conducción autónoma falla.
Sistema de reconocimiento autorización EEE
También se puede autorizar los ensayos en España si se recibe el reconocimiento de que es seguro por cualquier Estado del Espacio Económico Europeo. Eso incluye a los países de la Unión Europea (UE): Alemania, Bélgica, Croacia, Dinamarca, España, Francia, Irlanda, Letonia, Luxemburgo, Países Bajos, Suecia, Bulgaria, Eslovaquia, Estonia, Grecia, Malta, Polonia, República Checa, Austria, Chipre, Eslovenia, Finlandia, Hungría, Italia, Lituania, Portugal y Rumanía. Pero también entra Reino Unido, Islandia, Liechtenstein y Noruega.
La DGT especifica que las pruebas, operaciones y vehículos objeto de la autorización del país extranjero perteneciente a la EEE deben ser parecidas a las que se plantean en España. Además de la aportación de la solicitud, los fabricantes deberán presentar datos sobre el entorno operacional, operadores y vehículos, resultados de pruebas ya realizadas y otro tipo de documentación que se pudiera requerir.
Sistema de acceso especial
La DGT comenta que hay otro sistema que podrían considerar válido para el acceso a las carreteras españolas para los ensayos de forma excepcional. Para ello, las compañías de automóviles deberán aportar información y datos sobre métricas de seguridad real de operaciones que se hayan realizado en otro Estado del EEE o terceros países.
También pueden solicitar realizar pruebas en España si presentan una evaluación de la seguridad del vehículo y sus sistemas por cualquiera de los procedimientos apuntados en los puntos anteriores. De forma excepcional, también pueden enseñar un esquema de auto-declaración o una autorización emitida por un tercer país, según la nota de prensa de la DGT.

Habrá tres fases de pruebas
La Dirección General de Tráfico especifica que, para considerar un vehículo completamente autónomo y seguro, deberán realizarse tres fases de pruebas. Estas vendrán determinadas «en función de la madurez tecnológica y el alcance de las mismas, con requisitos específicos de seguridad, supervisión y documentación técnica».
Las fases son:
- Controlada (fase 1). Si la tecnología está recién creada o en proceso de investigación y desarrollo inicial o solo se ha probado en entornos restringidos o en simulación. En ese supuesto, todavía necesita validación, más desarrollo y supervisión de su seguridad. Por lo tanto, los ensayos se harán de forma controlada, en entornos limitados. Esta fase corresponde a estadios iniciales o intermedios de la tecnología o prototipos.
- Extensiva (fase 2). Se lleva a cabo cuando la tecnología está lo suficientemente desarrollada y probada para operar «en entornos operacionales más amplios y de forma continuada». Se realizan pruebas extensivas «en condiciones más reales». Por lo general, corresponde a niveles intermedios de desarrollos, previos a la puesta en marcha del servicio, para vehículos que quieren obtener un certificado de homologación.
- Pre-desliegue (fase 3). Es la fase previa antes de la comercialización o puesta en marca del servicio. Aquí se incluyen vehículos con sistemas de conducción ya han sido sometidos a una fase de pruebas extensiva o similar o sistemas homologados que pretende realizar ensayos de sus funciones «en vías abiertas al tráfico en España» para obtener la autorización administrativa o para conseguir la homologación en funcionalidades todavía no homologadas.