Los móviles con Windows Phone de Nokia tuvieron un buen estreno en sus primeros nueve meses. Sin embargo, a pesar de despegar incluso mejor que el iPhone en su día el esfuerzo en márketing y las rebajas con los que fueron promocionados han dejado un balance económico negativo para Nokia.
Un estudio realizado por Strategy Analytics muestra las buenas cifras de ventas que habrían tenido en sus primeros nueve meses los Nokia Lumia. Recientemente el propio fabricante finlandés publicó los resultaos del segundo trimestre de 2012, en el que aseguró que había vendido 4 millones de unidades en este periodo. En total, según el último estudio, en los tres primeros trimestres a la venta, la gama Lumia habría vendido 6,9 millones de dispositivos.
La firma asegura que esta cantidad está por encima de las ventas del iPhone, que habría llegado a 3,7 millones de unidades en sus primeros nueve meses cuando se lanzó en 2007 y por encima de los equipos Android de Samsung, que se habrían quedado en el mismo periodo en 1,3 millones de terminales. La variedad de dispositivos Lumia en la gama media habrían sido la clave para superar al equipo de Apple, mucho más caro que éstos. También hay que tener en cuenta que la adopción de smartphones es mucho más común ahora que hace cinco años. En cualquier caso, desde Strategy Analytics animan tanto a Nokia como a Microsoft a ser optimistas de cara al futuro, cuando Windows Phone 8 llegue al mercado.
No obstante, la situación de Nokia tras los últimos resultados presentados no anima a este optimismo. La compañía escandinava atraviesa un bache serio, al haber sumado pérdidas millonarias al comienzo de 2012 asistiendo al auge de sus competidores. Esta situación contrasta con los beneficios económico del gigante de Cupertino, que se han disparado en el último año. Por la misma situación atraviesa Samsung, cuyo terminal de alta gama Galaxy S3 ya ha vendido 10 millones de unidades.
El éxito de los Nokia Lumia puede entenderse por la fuerte inversión de Nokia en márketing. La pérdida de presencia de la firma nórdica en el mercado ha obligado a la compañía a realizar un gran esfuerzo en este sentido que se ha dejado notar en los resultados económicos. A ello hay que sumar los descuentos a la hora de ofrecer estos terminales a los usuarios, a pesar de lo cual no han conseguido que Windows Phone despegue en el mercado.
El último de estos casos fue el del Nokia Lumia 900, que fue rebajado hasta la mitad por la compañía en Estados Unidos de cara a deshacerse del actual stock ante la llegada en otoño de la nueva versión de Windows Phone. Por ello, hay que entender estos buenos resultados desde la prudencia, porque si bien son ventas millonarias en número de terminales, el beneficio económico para la empresa ha brillado por su ausencia.