Se acabó la fiesta en Telegram: la app enciende las luces y vigilará más de cerca los chats privados
El CEO de Telegram ha compartido por primera vez sus opiniones sobre su detención en Francia, y ha avisado de un proceso de cambio en la aplicación para detectar con mayor efectividad comportamientos ilegales dentro de la misma.
Días después de la liberación con condiciones del CEO de Telegram, Pável Dúrov, y justo tras compartir sus primeras declaraciones tras la detención, Telegram ha dado un volantazo para empezar a moderar y vigilar más lo que sus usuarios hacen en grupos de chat privados. Pese a que, en un principio y con Dúrov retenido en Francia, desde Telegram afirmaron «no tener nada que esconder», la carta pública que ha escrito el CEO muestra un cambio en el discurso.
Y es que, pese a decir que la detención supuso una «sorpresa» y ha compartido los motivos por los que no ve correcto el comportamiento de las autoridades francesas, sí que ha admitido dificultades a la hora de controlar el crecimiento de la app de mensajería, y ha afirmado haber iniciado cambios internos en su funcionamiento.
«Publicamos informes de transparencia diarios […] Tenemos líneas directas con ONG para procesar solicitudes de moderación urgentes más rápido. Sin embargo, escuchamos voces que dicen que no es suficiente. El aumento abrupto en el número de usuarios de Telegram a 950 millones causó problemas de crecimiento que facilitaron que los delincuentes abusaran de nuestra plataforma. Es por eso que me puse como objetivo personal asegurarme de mejorar significativamente las cosas en este sentido. Ya hemos comenzado ese proceso internamente y compartiré más detalles sobre nuestro progreso con ustedes muy pronto», escribe Dúrov en los últimos párrafos.
Normativa más estricta
El comienzo de este «proceso» ya se ha dejado ver con un cambio en la página de Preguntas Frecuentes (FAQ) de Telegram. Una de esas preguntas modelo dice: «Hay contenido ilegal en Telegram. ¿Cómo lo elimino?». Hasta el 5 de septiembre, la respuesta que desde Telegram daban a esa cuestión era: «Todos los chats y chats grupales de Telegram son privados entre sus participantes. No procesamos ninguna solicitud relacionada con ellos».
Sin embargo, esto acaba de cambiar. La nueva respuesta indica: «Todas las apps de Telegram tienen botones «Reportar» que te permiten marcar contenido ilegal para nuestros moderadores, con unos pocos toques», precediendo a unas instrucciones sobre cómo reportar contenido. Más abajo, también enlazan a una guía sobre cómo reportar contenido en contexto de la Ley de Servicios Digitales en la UE.
No obstante, Telegram siempre ha permitido reportar mensajes de chat de cualquier grupo a los moderadores, en forma de reenvío, y su código fuente no ha cambiado en este sentido. Los chats entrantes también pueden denunciarse pulsando en Bloquear > Reportar. Este cambio en las FAQ, eso sí, podría ayudar a que más gente sepa cómo denunciar contenido, lo que dará más trabajo a los moderadores.
De esta forma, desde Telegram han modificado el texto para dejar más claro cómo se puede reportar el contenido, aunque ya fuera posible hacerlo anteriormente, y ya tuvieran un equipo de moderadores activo antes de la reciente polémica. Más allá de este énfasis en la moderación, los chats siguen siendo privados, y Telegram sigue queriendo ofrecer un método de comunicación seguro y sin injerencias por parte de actores externos.
A la app de mensajería se le acusó formalmente de servir como canal de transmisión de contenido de abuso a menores y tráfico de drogas, aunque también se sabe que sirve a hackers y ciberdelincuentes, entre otros.
El CEO se defiende
Pese a que su detención parece haber propiciado este cambio de ruta para Telegram, Dúrov se ha defendido con solidez frente a las acusaciones de la Justicia francesa en estas últimas declaraciones.
«Utilizar leyes de la era anterior a los teléfonos inteligentes para acusar a un director ejecutivo de delitos cometidos por terceros en la plataforma que él administra es un enfoque equivocado«, asegura. Además, critica que las autoridades francesas no contactasen primero con el representante oficial de Telegram para la Unión Europea, así como recuerda que ya ha colaborado anteriormente con Francia para mejorar las comunicaciones entre Telegram y su gobierno.
«Estamos dispuestos a abandonar los mercados que no son compatibles con nuestros principios, porque no lo hacemos por dinero. Nos mueve la intención de hacer el bien y defender los derechos básicos de las personas, en particular en los lugares donde estos derechos se violan», recoge la carta de Dúrov.
«Ningún innovador creará nunca nuevas herramientas si sabe que puede ser considerado personalmente responsable del posible abuso de esas herramientas. Establecer el equilibrio adecuado entre privacidad y seguridad no es fácil», lamenta el emprendedor tecnológico.