Estrellar una nave espacial contra un asteroide: así es la misión DART de la NASA
Estamos acostumbrados a que las misiones espaciales sean de exploración. Sin embargo, hay otra rama de los viajes espaciales cuya finalidad es más defensiva y eso es precisamente lo que va a hacer la misión DART de la NASA.
Tan solo imagina el coste que tiene fabricar una nave espacial. Seguro que hay unos cuantos ceros en dicha cifra. Ahora imagina que toda esa millonada va a ser usada para estrellarse contra un asteroide… de forma intencional. Concretamente, la NASA hará explotar 394,5 millones de dólares (308 millones en el desarrollo de naves espaciales, 70 millones en servicios de lanzamiento y se espera que se gasten 16,5 millones en operaciones y análisis de datos).
La misión DART de la NASA
La misión de redirección de doble asteroide, o DART, por sus siglas en inglés, es uno de los proyectos más peculiares de entre los cientos que la NASA tiene entre manos.
La misión DART es la primera misión de defensa planetaria que prueba métodos de desviación de asteroides.
Efectivamente, se trata de una primera prueba de un programa que pretende atacar la amenaza futura que podría provocar que un asteroide tuviera como rumbo un choque contra la Tierra. Como más vale prevenir que curar, esta misión DART fue lanzada el 23 de noviembre de 2021 a bordo de un Falcon9 de SpaceX y tiene previsto alcanzar su objetivo el mes que viene, más concretamente el 26 de septiembre.
El objetivo de esta primera fase de DART es un asteroide binario cercano a la Tierra, Didymos, y su pequeña luna Dimorphos, de unos 780 metros y 160 metros de diámetro, respectivamente.
La nave espacial no disminuirá la velocidad, chocando intencionalmente contra la pequeña luna del asteroide, Dimorphos. El choque debería cambiar el tiempo que tarda Dimorphos en orbitar a Didymos, lo que demuestra que la técnica del impacto cinético funciona.
Si bien ninguno de los asteroides representa una amenaza para la Tierra, la misión DART demostrará que una nave espacial puede navegar de forma autónoma hacia un impacto cinético en un asteroide objetivo relativamente pequeño, y que esta es una técnica viable para desviar un asteroide potencialmente peligroso, si alguna vez se descubre uno.
Hera, la misión posterior de la ESA
No solamente la NASA tiene en marcha este proyecto de corrección de trayectorias, sino que la Agencia Espacial Europea también tiene en marcha otro proyecto similar a raíz de la misión DART. La ESA lanzará la nave espacial Hera en octubre de 2024.
Hera analizará las secuelas de la misión DART de la NASA y será de vital importancia para comprender el futuro de la tecnología de defensa planetaria. Aunque su lanzamiento está programado para octubre de 2024, no se espera que Hera llegue a su destino hasta 2026.
Una vez que llegue, Hera investigará la misma zona unos años más tarde, una vez que la zona esté despejada. La nave espacial medirá el cráter de impacto dejado por la DART, lo que permitirá a los científicos evaluar mejor el éxito general de la misión. También tomará imágenes y medidas de alta resolución para mapear Dimorphos con un detalle sin precedentes.