El pasado viernes Microsoft liberó la versión que antecederá al lanzamiento definitivo de Windows 8 a finales de año. Os presentamos una comparativa en la que se analiza el rendimiento de esta versión con Windows 7, el último sistema operativo final que lanzó la compañía hace casi tres años.
La gran apuesta de Microsoft para este año dentro del sector del software es Windows 8. Después de mucho tiempo en desarrollo, la compañía de Redmond tiene todo a punto para su lanzamiento presumiblemente en octubre de este año. Desde hace unos días está disponible la versión Release Preview, la última que publica en fase de pruebas antes de la comercialización de la plataforma. Ya vimos todas sus novedades, pero una comparativa publicada por Zdnet nos ofrece el rendimiento de la misma en comparación con Windows 7, el último sistema operativo estable del gigante norteamericano.
Para elaborar la comparativa se ha utilizado un PC de sobremesa con las siguientes prestaciones: procesador Intel Core i7-2600K, 4 GB de memoria RAM DDR3-1600, gráfica EVGA 01G-P3-1460-KR GeForce GTX 560, todo ello sobre una placa base GIGABYTE GA-Z77MX-d3h y con un disco duro Western Digital Caviar de 1 TB y fuente Corsair TX650 V2 de 650 vatios. En las pruebas se ha utilizado la versión de 64 de Windows 8 Release Preview y se ha procedido a emplear distintos benchmarks de referencia en la industria.
Entre las primeras conclusiones a bote pronto analizando los resultados de la mayoría de pruebas a los que se sometió esta versión RP, la versión Consumer Preview (lanzada en febrero) y Windows 7 se observa que el rendimiento general es algo superior a Windows 7. Por ejemplo, el tiempo de arranque se ha visto reducido respecto al anterior sistema operativo, algo por lo que Microsoft apostó desde el primer momento y que parece haber logrado. El inicio de sesión y el inicio del escritorio se acelera varios segundos respecto a Windows 7.
Asimismo, cabe resaltar que al compararse con la anterior versión beta de Windows 8, la Consumer Preview, también se observan ligeras mejoras, lo que demuestra que Microsoft ha seguido apuntalando su próxima plataforma en los últimos meses. También destaca la gran mejora en la transcodificación de audio y vídeo de Windows 8 RP respecto a Windows 7, aunque la mayor diferencia entre ambos se da en el benchmark que mide la capacidad de la CPU, HDD, SSD, memoria y subsistema gráfico.
Sin embargo, no se observan grandes cambios en las pruebas que miden el rendimiento gráfico del equipo en juegos 3D. Por ejemplo, en el benchmark 3D Mark 11 Windows 8 RP es incluso superado ligeramente por Windows 7. La herramienta Alien vs Predator sobre este juego de Sega (con resolución de pantalla 1920×1080 píxeles y DX 11 habilitado) también ofrece una ligerísima ventaja al anterior sistema operativo. En definitiva, se nota una mejora entre ambas plataformas y a buen seguro Microsoft consigue incrementarla en los próximos meses.
¿Has probado Windows 8 Release Preview? ¿Crees que mejora notablemente el rendimiento respecto a Windows 7?