La banda ancha de alta velocidad ha pegado un importante estirón en el último año. Así lo demuestra el último informe publicado por Akamai, en el que se refleja que el porcentaje de usuarios que ya navegan por encima de los 10 Mbps se ha doblado en el último año. Concretamente ha pasado del 5,09 al 13,79%.
La salud de la banda ancha en España mejora a un fuerte ritmo. Tradicionalmente nuestro país había ocupado los últimos puestos dentro de los ránkings de velocidad en Europa, pero el despegue de la fibra óptica y las conexiones de alta velocidad en los últimos dos años ha propiciado que tanto la velocidad media a la que navegan los internautas como el porcentaje de conexiones por encima de los 10 megas aumenten considerablemente.
La última prueba de ello nos ha llegado a través del Informe Trimestral publicado por Akamai con datos del tercer trimestre de 2013. En éste se apunta a que la velocidad media en nuestro país está fijada en los 6,8 Mbps. Si bien puede parecer una cifra baja cabe señalar que la velocidad media a nivel mundial está establecida en los 3,6 Mbps.
La mejoría de las conexiones en nuestro país ha sido notable especialmente en lo referido a la banda ancha de alta velocidad. Como tal, Akamai considera a las conexiones que superan en velocidad real los 10 Mbps. Según sus últimos datos, en España el 13,79% de las conexiones ya cuentan con estas velocidades. Igualmente, la cifra puede parecer escasa si se compara con otros países, pero si tenemos en cuenta que un año atrás este porcentaje apenas era del 5,09% se aprecia una notable diferencia.
Dicho porcentaje permite acercarse a nuestro país a la media mundial de conexiones por encima de los 10 megas, que hasta ahora es del 19%. Las previsiones de mejora son de lo más optimistas si tenemos en cuenta el despliegue continuado en redes de nueva generación, impulsado principalmente hasta el momento por Movistar pero al que se sumarán de forma progresiva el resto de operadores con sus propias inversiones. Todo ello sin olvidarnos de los operadores de cable como ONO y los regionales, cuyas conexiones de alta velocidad también siguen ganando presencia.