Microsoft no cede en su posición de acabar con el soporte para Windows XP. La compañía ha vuelto a insistir en que a partir del 8 de abril de este año se acabarán las actualizaciones de seguridad oficiales para este sistema operativo, que sigue siendo el segundo más utilizado en todo el mundo.
El 8 de abril sigue siendo el día marcado en el calendario por la compañía de Redmond para poner punto y final al soporte oficial de Windows XP. Después de especulaciones en torno a un posible aplazamiento, Microsoft ha querido insistir en que no retrasará esta fecha, tal y como leemos en Softzone.es. De este modo, se mantiene firme en sus advertencias, lanzadas ya de forma oficial desde hace bastante tiempo.
Así, a partir de ese día el gigante de Redmond se desentenderá a la hora de actualizar el sistema operativo que, recordemos, lanzó al mercado hace una docena de años. Esto significa que todo aquel usuario que lo mantenga en su PC corre el riesgo de sufrir ataques en su equipo de todo tipo ya que Microsoft no tapará mediante parches o actualizaciones posibles nuevos agujeros de seguridad que se detecten en el software.
«Los usuarios que tengan instalado Windows XP ya no recibirán nuevas actualizaciones de seguridad, no se harán más revisiones, no habrá opción de soporte técnico asistido gratuito o de pago, o actualizaciones de contenido técnico en línea de Microsoft», señala la compañía en su último comunicado. «Una plataforma lanzada hace 12 años no puede hacer frente a las necesidades del negocio y de la tecnología de hoy en día ni a las amenazas de seguridad», sentencia.
Aunque es comprensible la posición de la firma estadounidense, que tiene en el mercado otras opciones como Windows 7 o el más reciente Windows 8.1, su postura puede dar pie a una situación de alto riesgo para miles de usuarios. Esto viene provocado por el hecho de que XP sigue siendo el segundo sistema operativo más utilizado en todo el mundo. Su cuota de mercado, según Net Applications, permanece en el 28,98%, lo que indica que uno de cada cuatro PC sigue teniendo instalado este sistema operativo.
Así pues, cabe recomendar a los usuarios que continúen con XP en su ordenador que vayan dando el salto a versiones superiores u otras alternativas. En caso contrario, las amenazas que se prevé se disparen a partir de abril para esta versión de Windows podrían tener graves consecuencias en su seguridad.