Desde el propio Gobierno decidieron adelantar la fecha para el establecimiento del nuevo Dividendo Digital al 1 de enero de 2014, un año antes de lo que en principio sería el momento marcado. Sin embargo y a pocos días de la llegada del nuevo año, parece que el ejecutivo presidido por Mariano Rajoy no se encuentra en disposición de poner en marcha el Dividendo Digital que afectará a la ordenación del espacio radioeléctrico y por tanto al futuro de la TDT y el despliegue del 4G.
Tras el cese de las emisiones de los canales de televisión analógicos, se está llevando a cabo una regulación por parte de los organismos internacionales de telecomunicaciones, así como las instituciones comunitarias, que supondría lo que conocemos como “Dividendo Digital”. El dividendo digital supondría la liberación de la banda de frecuencias de 790 a 862 MHz (canales radioeléctricos 61 al 69) para su utilización por parte de servicios avanzados de comunicaciones electrónicas de carácter paneuropeo, básicamente ahora, el 4G.
Y, ¿Por qué esta banda? Porque es una banda que tiene un gran potencial para el suministro de un amplio rango de servicios en movilidad, además de que las señales que se encuentren en estas frecuencias tienen mejores propiedades de propagación y penetración en los edificios que las bandas superiores utilizadas actualmente.
Desde ambas partes, se clama por una solución aunque cada uno tira por sus intereses. Las operadoras de telecomunicaciones están empezando a ofertar los servicios 4G en los espacios radioeléctricos disponibles (banda 1.800 MHz), y que no son los ideales para este fin. Desde Uteca (Unión de Televisiones Comerciales en Abierto) manifestaban el mes pasado una preocupación por la demora de las asignaciones definitivas para sus canales de televisión.
Desde el Gobierno, por medio del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, aseguraba allá por el mes de mayo, que cumplirían con la promesa de adelantar el Dividendo Digital, liberando la frecuencia de televisión para las tecnologías de 4G. En lo que suponía una respuesta contundente ante las dudas que por entonces ya se tenían.
Tal y como informan desde TVZone, parece que finalmente no cumplirán las fechas que ellos mismos se habían autoimpuesto y retrasarán una vez más la deseada llegada del Dividendo Digital y con él, el despliegue del 4G. Las últimas informaciones hablan de un nuevo auto judicial que meta prisa al Gobierno y de reuniones entre los grupos de cadenas de la TDT, que no quieren perder canales. Veremos cómo se resuelve finalmente todo esto.