Si hay un juego para dispositivos móviles que ha arrasado a lo largo de 2013 ése es Candy Crush Saga. El título de King cuenta con millones de usuarios en todo el mundo, algunos de los cuales sufren ciertas consecuencias físicas negativas por su adicción al juego de los caramelos.
Varios testimonios confirman algunas de las secuelas no esperadas dejadas entre los jugadores a Candy Crush. El título que ha llevado a su desarrolladora a generar al día unos 470.000 euros al ser jugado millones de veces por numerosos usuarios ha provocado una adicción importante en muchos de estos. Según informa el diario británico Daily Mail, algunas «víctimas» del juego reportan consecuencias llamativas por la cantidad de horas enganchados a sus móviles, tabletas u ordenadores.
Un ejemplo es el testimonio de Lucy Berkley, que encaja en el perfil medio de usuarios más enganchados al juego (mujeres entre 25 y 55 años). A sus 44 años asegura que hace unos días llegó a su trabajo con un fuerte dolor de espalda y brazos debido únicamente a haber pasado más de diez horas seguidas pasando niveles en el juego. Además, afirma que algunos compañeros de su oficina también cuentan con un grado de adicción al juego similar. Otro relato es el de Steph Brody, quien admite que lo primero que hace al despertar es «encender el móvil y jugar para superar niveles antes de llegar al trabajo».
Por si fuera poco, se advierte de los riesgos económicos que puede llevar esta adicción. Aunque jugar a Candy Crush es gratuito, el título ofrece la posibilidad de realizar micropagos para ayudar a los usuarios a superar niveles. Una de estas afectadas afirma haber pagado unas 150 libras (177 euros) para facilitar sus partidas, algo que cree que «ha merecido la pena». No obstante, se pueden dar casos de gastos incontrolados y que incluso menores de edad se enganchen al juego y paguen ese plus.
Esta información, que no deja de ser anecdótica puesto que sigue siendo una minoría la afectada de este modo por el juego de King, resalta las consecuencias que puede tener la adicción a juegos móviles. Uno de los más conocidos es el síndrome del túnel carpiano que afecta a muchos gamers y cuya solución pasa en último lugar por la cirugía.
Por otro lado cabe destacar que la posibilidad de pagar ciertos extras puede llevar a un descontrol en los gastos a los más adictos tanto a este como a otros juegos del estilo. Por ello conviene tener en cuenta este posible riesgo que a priori muchos pasan por alto y cuyas consecuencias pueden ser serias.