Agilizar el embarque en los vuelos es uno de los objetivos de una nueva tecnología que implementará Aena en el futuro y que va a probar en tres aeropuertos nacionales.
En vez de tener que cargar con tanta documentación, un nuevo sistema de identificación biométrica servirá para identificarse de forma más sencilla e infalible.
Nuevo sistema de identificación biométrica
Aena, la empresa pública española que gestiona los aeropuertos, va a poner en marcha un nuevo sistema de identificación de cara al embarque en los vuelos.
En vez de necesitar portar tu tarjeta de embarque (que ha dejado de ser exclusivamente en papel para aceptarse códigos QR y otras formas de identificación por móvil) y tu DNI o cualquier otro documento identificativo como pasaporte, ahora será tu propia biometría la que deje claro que quien vuela es la persona a la que corresponde el billete de avión.
El usuario que quiera beneficiarse de este sistema de identificación deberá registrarse una única vez en el programa biométrico de Aena, también disponible desde unos quioscos del propio aeropuerto. Posteriormente, la tarjeta de embarque se asociará automáticamente a la ficha de identidad almacenada en la base de datos biométricos de la empresa pública.
El objetivo es que los viajeros, una vez registrados en el programa biométrico, puedan identificarse de esta forma en toda la red aeroportuaria nacional y con cualquier aerolínea que participe en el programa.
Una vez integrado, se permitirá realizar todos los procesos aeroportuarios de manera biométrica, desde el registro y comprobación de identidad, facturación, acceso al control de seguridad y embarque, sin tener que mostrar ningún documento en el proceso.
Tres aeropuertos españoles en pruebas
Antes del despliegue definitivo de la tecnología en la red de aeropuertos de Aena, se han llevado a cabo desde 2019 varias pruebas pilotos para probar esta tecnología de identificación.
La primera prueba se realizó en el Aeropuerto de Menorca, con registros previos en quioscos digitales. En aquel entonces, los participantes de este primer test accedían al filtro de seguridad y embarcar de manera biométrica sin necesidad de mostrar las tarjetas de embarque o documentos de identidad.
Más tarde, la prueba llegó a uno de los dos principales aeropuertos nacionales, para probarlo en uno de los más concurridos. En el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas se probó lo anterior y se incluyó el alta a través de la app de Aena o de las aerolíneas participantes para no necesitar de un trámite in situ en el aeropuerto.
Por último, siendo la más completa y también en un aeropuerto enorme, en el Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat también se incluyó la facturación de equipaje por biometría en modo ‘Self Bag Drop‘.