El protocolo TCP/IP ha sido, desde la creación de Internet, la mejor manera para transmitir información por la red. Fue implementado por primera vez en la red de ARPANET, y estaba diseñado inicialmente para redes fijas. En su casi medio siglo de vida ha servido para conectar a miles de millones de personas, pero hay fallos de base que hacen que no sea ideal usarlo para algunas de las innovaciones que introduce el 5G.
Así lo ha anunciado hoy el ETSI (European Telecommunications Standards Institute) junto a la creación de un nuevo grupo de estandarización para un protocolo de red no basado en IP (Non-IP Networking, o ISG NIN). Este nuevo protocolo no tiene nada que ver con el New IP que ha propuesto crear China, con el que buscan que sea más fácil identificar a los usuarios en la red incluyendo información del origen y destino de cada acceso.
ISG INN: el grupo que buscará el sustituto del TCP/IP
El ISG NIN intentará crear estándares que permitan un uso más eficiente del espectro, una mayor seguridad, y una latencia mucho menor. Estos son tres de los principales inconvenientes que ofrece en la actualidad el protocolo TCP/IP al operar con redes 5G, y operadores de todo el mundo están buscando tecnologías candidatas que se adapten mejor a sus necesidades que el protocolo usado en la actualidad.
Ya en 2015, algunos operadores móviles identificaron problemas con las redes 4G y el protocolo TCP/IP. Entre ellas se encuentra el complejo e ineficiente uso del espectro que se hace en la telefonía móvil, diversos problemas de seguridad y de calidad de servicio, y el uso de otras funciones con las que el protocolo no había diseñado para lidiar.
El Internet original no estaba diseñado para operar como lo hace ahora
El protocolo TCP/IP estaba diseñado para acceder a ordenadores centrales con sus correspondientes terminales para ejecutar programas en ellos. Los ordenadores se identificaban a través del punto por el que se unían a la red, el cual no cambiaba nunca. Con las redes móviles esto cambia, ya que estamos constantemente cambiando de antena, lo que requiere que haya paquetes que lleven información del dispositivo y del punto de unión a la red. Además, la seguridad no era un problema porque sólo había usuarios de confianza que pudieran acceder a las redes.
Los resultados de este nuevo grupo se espera que sean aplicables a redes móviles privadas y luego a redes públicas, tanto en las redes centrales como en los enlaces de extremo a extremo, como los que hay entre los usuarios y las antenas.
La primera tarea del grupo será crear un informe que analice en detalle todos defectos del protocolo TCP/IP y cómo un sistema alternativo solucionaría esos problemas. También crearán un marco de referencia para realizar pruebas que demuestren la efectividad de los nuevos protocolos.