El Gobierno ha anunciado su plan con el que pretende que el 98% del territorio español tenga acceso a la banda ancha a la velocidad mínima de 30 megas antes del 1 de enero de 2020. Para entonces otros países como Finlandia también tendrán garantizada velocidad mínima de acceso a Internet, con una gran diferencia: el mínimo serán 100 megas y su fecha de instauración es 2015.
El secretario de Estado de Telecomunicaciones, Bernardo Lorenzo, ha sido el encargado de anunciar que el Real Decreto en materia de espectro radioeléctrico que prepara el Gobierno para el reparto del dividendo digital obligará a que el 98% puedan tener acceso a banda ancha de 30 megas a partir del 1 de enero de 2020. En información publicada por Europa Press, Lorenzo se ha congratulado de que España se anticipe así a los objetivos propuestos en la Agenda Digital europea.
Estos objetivos señalan el año 2020 como el plazo máximo para que toda la población del continente navegue a esta velocidad y que al menos la mitad de los ciudadanos tengan acceso a conexiones ultrarrápidas de 100 Mbps. A tenor de los retrasos por parte de las instituciones para sacar adelante sus proyectos sobre banda ancha -véase el ejemplo de la banda ancha universal de 1 Mbps y su retraso-, poco podemos esperar que se adelante España a esta fecha.
Lorenzo ha vuelto a vanagloriarse de la buena salud de las conexiones en nuestro país. «La velocidad media de nuestro país es superior a la de la Unión Europea«, ha afirmado al señalar que el 62% de las conexiones de España está entre los 2 y 10 megas frente al 57% en Europa. Asimismo, el porcentaje de empresas con banda ancha y la penetración de la banda ancha en España es superior a la que existe de media en el resto del continente.
Eso sí, Lorenzo ha admitido que «el precio de la banda ancha en España es más cara que la media de la Unión Europea», algo que en otras ocasiones no ha sido reconocido. El político se ha escudado en la «orografía y el resto de características del país» para el desarrollo de una actividad que «siempre es compleja».
Las odiosas comparaciones con otros países
El propio Lorenzo ha sido el encargado de comparar la decisión del Gobierno con otros países, aunque parece no conocer demasiado bien los planes de los mismos. El secretario de Estado para las Telecomunicaciones ha indicado que España es el único país que ha incluido la banda ancha dentro del servicio universal junto a Finlandia. No obstante, las diferencias entre los planes del Ejecutivo y los del país escandinavo saltan a la vista.
A mediados de julio de 2010 Finlandia aprobaba su ley con la que incluía la banda ancha en el servicio universal. Los ciudadanos finlandeses tienen garantizado 1 Mbps de velocidad desde el pasado año, mientras que en apenas cuatro años la velocidad mínima será de 100 megas. Algunos operadores del país nórdico ofrecen ya conexiones de 200 megas por 54,90 euros al mes, tal y como vimos en nuestro análisis de la banda ancha en Finlandia.
Otros países también tienen en marcha la expansión de las conexiones ultrarrápidas. En Reino Unido se espera que en el año 2015 al menos el 66% de la población tenga acceso a conexiones de fibra de 100 megas. En Italia se espera que para ese año la mitad de los usuarios puedan conectarse también a la red de fibra impulsada por operadores y Gobierno. Si salimos de Europa encontramos el plan más ambicioso: Corea del Sur espera que sus internautas naveguen a 1 Gbps en 2012.