Se han vuelto locos. Años anhelando una conexión a Internet decente, equiparable a la del resto de los europeos y, en una semana, los proveedores de acceso han tirado la casa por la ventana. La oferta más pequeña es de un Mega, la mayor, de cuatro. Todas oscilan entre los 30 y los 40 euros al mes, y la mayoría viene con extras. Que si un router inalámbrico, que si llamadas gratis, que si contrato sin compromiso de permanencia… Todos los grandes operadores, incluso Auna que anda buscando compradores, han lanzado su oferta. Falta por conocer la de Telefónica y seguro que dará que hablar…
Lo dicho, una locura, bendita locura. Y ¿para qué tanta velocidad? No sólo se navegará por Internet con mayor rapidez, sino que los operadores podrán ofrecer películas, televisión, música… lo que se conoce como «todo sobre IP».
El primero en golpear fue Wanadoo. El miércoles de la semana pasada multiplicaba por cuatro su producto estrella, los 512 Kb, llegando a los dos Megas y manteniendo el precio en 36 euros. Un detalle importante es que la velocidad de carga se eleva hasta los 300 Kbs. La oferta incluye las llamadas locales, provinciales y nacionales gratis las 24 horas del día. Sin llamadas, la cuota baja a los 30 euros.
Ya.com respondió el lunes. Un Mega por 30 euros. En realidad, ya empezaron a duplicar el viernes anterior. Pero fue a comienzos de esta semana cuando se dedicaron a empapelar hasta las marquesinas de los autobuses con carteles proclamando su oferta. Tienen también la opción de las llamadas gratis por 33 euros. A simple vista, parecen mejores los dos Megas de Wanadoo que el Mega de Ya.com, pero eso depende. Además de que incluyen un router Wifi, en su caso no exigen cumplir el contrato de un año. Pero lo más importante es que esta duplicación de Ya.com corre de su cuenta. Apenas Telefónica tenga el visto bueno de la CMT, y eso será en pocos días, elevarán la velocidad hasta los dos Megas sin coste alguno. La elección está difícil.
Pues Jazztel lo ha complicado todo aún más. El miércoles respondió al envite ofreciendo cuatro Megas, router inalámbrico, llamadas locales y nacionales gratis y, de postre, el Internet Security de Panda por 33 euros al mes. Espere, no llame aún. Mañana, Ono lanza su pack ONO 3D: Internet a cuatro Megas, 100 canales de TV y teléfono, gratuito entre clientes, por 50 euros. Pero si se trata de ver quien da más, hay que esperar al rey del mercado. Telefónica aún tiene algo que decir y los expertos creen que pegará fuerte.
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones, CMT, tiene atada de pies y manos a Telefónica. Como operador dominante, todas y cada una de sus mejoras en velocidad o bajadas de precio deben pasar por el escrutinio previo de la CMT. Entre esto, su enorme cuota de mercado y que los otros operadores, en vez de tender sus propias líneas, se conformaban con revender el ADSL de Telefónica, tenían el negocio montado sin apenas riesgos. Desde el año 2000 hasta 2004, la velocidad estándar se mantuvo inalterada: 256 Kb de subida y 128 de bajada por 39 euros.
Pero en abril, vino un outsider, un pequeño con ganas de que las cosas cambiaran, y vaya que si cambiaron. Aunque Jazztel apenas ganó 10.000 clientes en el resto del año, su ADSL 1 Mega provocó el primer revolcón. Al mes siguiente Telefónica solicitó duplicar la velocidad de sus productos. Por último, el resto de operadores siguió su estela. Los 256 Kb pasaron a la historia, convirtiéndose los 512 en la velocidad más común. Ahora las cosas han sido al revés. Parece que la competencia se ha adelantado esta vez a Telefónica. Pero, sólo lo parece.
«El anuncio de los proveedores de ADSL de duplicar su velocidad de conexión se produce una vez que ha trascendido la intención de Telefónica de acometer un segundo proceso de duplicación. Hasta entonces, nadie había propuesto su ADSL al doble de velocidad«, dicen fuentes de la operadora. En efecto, en marzo se conoció su petición al regulador de pasar de los 512 Kb al Mega. Pero también fue por esas fechas cuando Ono lanzó sus tres Megas por 36 euros, como hiciera Jazztel en 2004. Telefónica añade otro argumento. «Nuestro compromiso es duplicar la velocidad de toda nuestra planta de ADSL, no sólo de ciertas líneas».
DISPONIBILIDAD. Esto da pie a analizar el talón de Aquiles de las nuevas ofertas. Telefónica, con su amplia red extendida en tres cuartos de siglo, puede ofrecer ADSL casi en cualquier lugar de España. Los otros operadores, no. Las ofertas de las cableras Ono y Auna dependen de si han tendido el cable o no en su zona. Ya.com, Wanadoo y Jazztel también sujetan sus nuevos productos a la disponibilidad geográfica. En los tres casos, sus promociones de uno, dos o cuatro Megas se limitan a los abonados que caigan dentro de la cobertura de sus propias centralitas. Los dos primeros ya cubren más del 50% del territorio nacional, llegando a más de siete millones de hogares. Jazztel asegura que, para el 20 de julio, llegarán al 30% de los potenciales clientes, y en octubre al 63. La tarea parece titánica, pero los datos reflejan el esfuerzo. De las 95.589 nuevas líneas de ADSL de abril, más de un tercio eran desagregadas.
«Por último», siguen con su defensa en Telefónica, «la duplicación de ADSL no es en sí misma un fin, sino un medio para que los clientes dispongan cada vez de más y mejores servicios». Por ahí irán sus planes. Una vez que la CMT le autorice la duplicación, «Telefónica dará dos veces, respondiendo con velocidad y algo más», asegura Jaime García Cantero. ¿Qué será ese algo más? El analista de la consultora IDC deja una posibilidad en el aire, «lo audiovisual». Mientras los demás sólo pueden vender conexiones, Telefónica ya tiene servicios que ofrecer para aprovechar tanta velocidad.
Ya lo apuntaron el mes pasado. Están preparando su propio producto de VoIP, telefonía por Internet. Y hay más. «Entre los últimos lanzamientos de Telefónica destaca, para hogares, la televisión digital interactiva Imagenio y en el segmento de pymes, los servicios de videosupervisión».
¿Y los precios, qué?, se pregunta Víctor Domingo, de la Asociación de Internautas. Aunque estas nuevas ofertas le parecen interesantes, cree llegado el momento de que bajen las tarifas. Si con la generalización de los dos Megas, España se pone a la par del resto de Europa, allí, el precio es hasta un 30% menor. Pero a Domingo le parece aún más urgente la universalización de la cobertura. «Sólo llegan a los usuarios con bucle desagregado, los que ya tenían buenas velocidades». Domingo teme que, de no remover estos obstáculos, el mercado se enfríe. De hecho, en abril hubo 116.589 altas, un 50% menos que en marzo. Con las nuevas ofertas, para cuando lea esto, es posible que España alcance los cuatro millones de usuarios de banda ancha.