Los ladrones ya no quieren copiar tu tarjeta en el cajero, ahora lo hacen por Internet
El robo de tarjetas bancarias es una de las principales amenazas con las que tienen que lidiar los bancos. Al año, en todo el mundo, esto genera billones de euros en dinero robado que acaba en manos de delincuentes, y que por suerte los bancos devuelven al usuario afectado por la estafa. Una manera típica de copiar tarjetas es en los cajeros, pero ahora se están robando cada vez más tarjetas por Internet cuando se usan para realizar pagos.
El E-skimming no para de crecer en todo el mundo
Ha sido el FBI el que ha alertado de un aumento del E-skimming. El skimming clásico de tarjetas se hace en los cajeros, pero el e-skimming se hace a través de Internet mediante la inyección de código malicioso y scripts en las pasarelas de pago de las tiendas online, los cuales registran los datos que los usuarios introducen en la web. Una vez un hacker tiene los datos, o los vende en la Dark Web, o los utiliza él mismo para realizar compras fraudulentas. La primera técnica suele ser la más común, ya que es otra persona la que va a cometer el delito de realizar el robo de dinero, y el hacker no deja huella en el proceso.
Entre las recomendaciones que el FBI recomienda seguir a empresas y negocios se encuentran:
- Actualizar y parchear sus sistemas a la última versión de software, además de tener antivirus y firewall
- Cambiar las credenciales por defecto y tener contraseñas únicas y seguras
- Tener autenticación en dos o más pasos
- Educar a los trabajadores en la importancia de la ciberseguridad, y evitar que hagan click en enlaces de phishing
- Segmentar los sistemas de red para evitar que los criminales puedan acceder a la red completa al hackear una parte.
También se pueden activar elementos como el Content Security Policy que sólo permite ejecutar elementos JavaScript de un listado de dominios fiables que tenga en la base de datos. Ese es uno de los principales vectores de entrada, donde también los enlaces de phishing que reciben los trabajadores suelen hacer que los hackers se hagan muy fácilmente con las contraseñas. Otro elemento que se puede activar es el Subresource Integrity, que evita que se cargue código JavaScript modificado y cuenta con verificación mediante hashes. Los usuarios son los que menos opciones tienen a sus disposición más allá del sentido común.
Billones de dólares anuales se pierden por el crimen en la red
El grupo Magecart es uno de los más prolíficos de los últimos años en esta actividad de robo online de tarjetas. Sus operaciones llevan teniendo gran éxito desde 2015, aunque llevan operando desde 2010, cuando lo hacían a menor escala. Tanto es así, que por cada ataque que realizan que llega a los medios, se han detectado miles que no se publican, y que afectan a plataformas de pago de terceros.
En total, se estima que han robado datos bancarios de millones de usuarios, con más de 2 millones de detecciones en los últimos años donde se han infiltrado en más de 1.000 plataformas de pago, incluyendo tiendas como Newegg. De hecho, tienen un script que automáticamente roba los datos de 57 pasarelas de pago y que puede implementarse en casi cualquier sistema de pago de una web.
No hay cifras aproximadas de cuánto dinero han podido llegar a robar, pero a nivel mundial se estima que el crimen cibernético es responsable de más de 5 billones de dólares anuales; más de tres veces el PIB de España.