Tras haber –casi- cerrado el año marcando un récord histórico cercano a los 20.000 dólares, el Bitcoin y el resto de monedas virtuales prácticamente no han cesado en su descenso. Este año, en febrero, se marcaba el mínimo de del Bitcoin con un valor de 5.922 dólares por cada una de estas monedas. Hasta la fecha, el mercado de las criptomonedas ha perdido la mitad de su valor desde que arrancó el año, y ya habían descendido de manera significativa al cierre del pasado año 2017.
Son casi constantes los titulares refiriéndose a problemas de seguridad de algunos exchange de criptomonedas. Y aunque la mayoría de ellos son de ICOs, estas informaciones afectan de forma negativa a todas las criptomonedas. Además, el abandono por parte de compañías tecnológicas importantes, como Facebook y Google –entre algunas otras-, dentro de su sistema de publicidad, ha provocado también una importante caída. No han ayudado tampoco, en absoluto, las noticias relativas a las intenciones regulatorias de diferentes países sobre las monedas virtuales, y el contexto internacional ha propiciado un descenso a los infiernos para todas las criptomonedas.
Las criptomonedas siguen en su incesable descenso a los infiernos: el Bitcoin pierde un 7,89% en tan solo 24 horas
En cuestión de un día, la principal criptomoneda, que es el Bitcoin, ha perdido un 7,89% según datos de Coinbase. El Bitcoin Cash se ha resentido aún más de los movimientos más recientes, con una caída superior al 11%, mientras que el Ethereum tiene registrada en estos momentos una caída del 9,47% durante las últimas 24 horas. La situación es parecida para el Litecoin, que en el último día ha registrado un importante descenso del 11,34%. No obstante, siguen siendo valores superiores a los anteriores al ‘boom’ de finales del pasado año.
El Bitcoin está en un +130%, aproximadamente, durante el último año. Es la criptomoneda que más ha crecido, y que mayor valor mantiene, mientras que el Bitcoin Cash sigue en positivo superando el +75%. El Litecoin y el Ethereum, un +87% y +47%, respectivamente, respecto a los valores de hace justo un año. Pero las previsiones siguen siendo pésimas para todas ellas.