Hoy 14 de noviembre es el Día Mundial de la Diabetes, en el cual se busca concienciar sobre los diferentes tipos de diabetes que existen, sobre las personas que la padecen, así como promover la investigación para encontrar la cura de cada una de ellas. En los últimos años, gracias a los avances tecnológicos, se ha mejorado la gestión y el control de la diabetes, sobre todo gracias a los medidores o monitores continuos de glucosa, o MCG (CGM por sus siglas en inglés).
Los medidores continuos de glucosa: una de las mayores revoluciones de la diabetes en los últimos años
Gracias a estos medidores continuos, tanto la propia persona con diabetes como sus familiares pueden controlar la glucemia en todo momento. Esto es especialmente útil en el tratamiento de diabetes tipo 1, y una gran ayuda para los padres, que gracias a emparejar los sensores con software como Nightscout, permite conocer en todo momento la glucemia de sus hijos (por ejemplo, en el colegio). Además, permite conocer más en detalle qué efectos tiene en el cuerpo las diferentes comidas o actividad física para poder actuar en consecuencia inyectando insulina o tomando alimentos de absorción rápida o lenta.
Estos sensores se insertan en la piel mediante un aplicador con aguja, la cual deja al salir un pequeño filamento que es el que realiza las lecturas de glucosa. Esta glucosa es la que está situada en el líquido intersticial de la piel, por lo que la medición de glucosa que obtenemos es algo más imprecisa que la sanguínea, además de llevar unos 10-15 minutos de retraso. Por ello, es necesario calibrar los sensores cuando los usamos mediante mediciones puntuales de glucemias en sangre con los medidores tradicionales. Entre los mejores que podemos comprar actualmente en España encontramos los siguientes.
Dexcom G5
Fabricado por la compañía que da nombre al producto, el Dexcom G5 es actualmente el monitor continuo de glucosa más avanzado del mercado. Es el más preciso (9% MARD). Su precio es también elevado, pero a cambio obtenemos la posibilidad de sincronizar el transmisor por Bluetooth con el móvil o el smartwatch sin necesidad de usar el receptor original, con las apps para iOS y Android. Además, es el único sensor apto para la inyección de insulina sin necesidad de medir glucosa capilar. Está formado por el sensor (que se inserta en la piel) y el transmisor que se coloca encima de este sensor.
Para el año que viene se espera el lanzamiento del Dexcom G6, con un sensor de mayor duración (10 días oficiales por los 7 del G5 actual, los cuales se pueden extender hasta varias semanas) y con sólo una calibración diaria (el G5 actual requiere dos; una cada 12 horas).
FreeStyle Libre
Fabricado por Abbott, y aunque no es considerado como un medidor continuo de glucosa (sino como un sistema de monitorización “flash”) es muy importante reseñar el FreeStyle Libre. Este es uno de los medidores más utilizados en la actualidad. Con él podemos usar el receptor oficial (que también es compatible con las tiras reactivas de FreeStyle), o también con el móvil mediante NFC, que recoge los datos de las últimas 8 horas al pasarlo por el sensor.
La aplicación oficial es algo limitada y no permite calibrar el sensor (algo bastante torpe por Abbot), aunque hay alternativas excelentes como Glimp que lo permiten. Si quieres convertirlo en un CGM de verdad, hay transmisores no oficiales como Nightrider o BluCon.
Cada sensor dura 14 días y tienen una precisión del 11,4% MARD, y al igual que los sensores mencionados en esta recopilación, se puede mojar y sumergir. Los sensores de FreeStyle Libre son los únicos que se pueden comprar en España de manera directa en la web, mientras que para el Dexcom y el Guardian Connect es necesario contactar a los fabricantes. A nivel de precio anual el precio es bastante similar, costando una caja de cuatro sensores del Libre 240 euros (duración de 8 semanas), similar al precio que tienen los de Dexcom (los cuales se pueden extender en uso). En el caso del Dexcom es necesario tener en cuenta que también hay que renovar cada cierto tiempo el transmisor (normalmente cada año)
Guardian Connect
Por último, encontramos el Guardian Connect, el más reciente en estar disponible en España lanzado este mismo 2017, en un sector que necesita un aumento de la competencia si alguna vez queremos ver precios más bajos. Se puede utilizar tanto con el receptor oficial como con aplicación a través de Bluetooth tanto para Android como para iOS. Cada sensor dura 6 días y tienen una precisión del 14% MARD.
¿Qué medidores llegarán en el futuro?
Para el futuro hay bastante esperanza, ya que en 2018 se lanzará al mercado (en Reino Unido en primer lugar) SugarBeat, un medidor continuo de glucosa no invasivo gracias a que utiliza un parche que se renueva a diario, al cual se le aplica el sensor que envía la información al móvil, smartwatch o al receptor oficial que se venderá por separado.
Glucowise es otro producto similar que llegará al mercado. Se pone en el dedo (como si fuera un pulsioxímetro) y muestra el dato puntual de glucemia usando radiofrecuencias de 65 Hz para detectar la glucosa en sangre. Con esto vemos que la tecnología para crear sistemas de medición no invasivos existe, y dentro de unos años supondrán un cambio aún mayor en la forma en la que se controla la diabetes. También está Senseonics Eversense, un sensor en forma de cápsula que se inserta debajo de la piel y dura 90 días.
España está todavía algo atrasada en financiar los medidores continuos de glucosa, ya que tienen que pagárselo los propios usuarios al no estar todavía bajo el amparo de la Seguridad Social (a pesar de las promesas en muchas comunidades). Esto contrasta con el resto de países de nuestro entorno, como Francia o Reino Unido donde estos ya han sido aprobados para ser financiados (el Freestyle Libre, al menos).
