La tecnología LTE-U que busca aprovechar las bandas de frecuencia sin licencia para mejorar el alcance y cobertura de las redes, está generando un intenso debate por sus posibles interferencias con los canales destinados a la tecnología WiFi. Las tensiones crecen entre los principales actores de este mercado y la lucha porque la tecnología LTE comparta “espacio” con los canales WiFi parece haber pasado a un nuevo nivel.
Existe una interesante pelea por permitir el uso de los canales WiFi para la tecnología LTE. La Wi-Fi Alliance quiere que las primeras pruebas comienzan en septiembre para intentar comprobar que no se producen interferencias entre los dos tipos de redes. Sin embargo, Qualcomm que es uno de los principales actores detrás de la tecnología LTE-U, quiere que las pruebas comiencen inmediatamente para que no se demore una eventual llegada al mercado.
Y este es precisamente el punto de desencuentro más importantes acerca de llegada de la nueva tecnología LTE-U. La Wi-Fi Alliance sigue defendiendo que los planes para que el LTE utilice frecuencias no licenciadas estará terminado y verificado a finales de septiembre, lo que supone posponer los planes un mes con respecto a las previsiones iniciales.
Lo cierto, es que el inicio de las pruebas se ha retrasado en el tiempo por la complejidad de todo lo que tiene que ser probado. No podemos olvidar que estamos hablando de la coexistencia en el mismo rango de frecuencias de dos tecnologías, donde se debe evitar que una de ellas cause interferencias y perjudique el normal funcionamiento de la otra.
LTE-U: uso de canales WiFi y mucho más
En alguna ocasión os hemos contado todos los detalles sobre LTE-U, el polémico futuro de las redes de telefonía móvil. Básicamente, esta tecnología, cuyas siglas hacen referencia a Long Term Evolution – Unlicensed, busca operar sobre las bandas de frecuencia sin licencia, también conocidas como ISM. Aquí también entrarían los canales de pequeños dispositivos, por debajo de los 433 MHz, o bien la banda de 5 GHz ocupada por la tecnología WiFi.
Y este es precisamente el principal punto de fricción y lo que convierte a esta tecnología en “polémica”. Por eso, desde la Wi-Fi Alliance quieren asegurarse al 100% que no se causarán interferencias entre ellas. En el otro lado, tenemos a Qualcomm y Ericsson peleando por su rápida implantación.