Pagar el acceso a Internet por días y no por meses, ¿una alternativa de futuro?

Los operadores móviles nos han acostumbrado durante los últimos años a las tarifas planas como fórmula para contratar la mayoría de sus servicios. A cambio de una determinada cantidad de dinero fija, los usuarios podemos hacer uso de sus servicios sin que tengamos que preocuparnos por la cantidad de datos que consumimos o de llamadas que realizamos. Una modalidad que comenzó con los servicios de internet en casa y que, de manera progresiva, ha ido ganando peso también en las líneas móviles. Especialmente a raíz de la llegada de las tarifas de datos ilimitadas.

Orange, sin embargo, ha decido dar un paso más allá en su estrategia y anunció durante el día de ayer un nuevo servicio de internet 5G dedicado en exclusiva a las segundas residencias. Y lo ha hecho introduciendo la posibilidad de pago por uso. Gracias al botón On / Off que encontraremos en el área privada, el cliente podrá encender y apagar la tarifa cuando vaya a hacer uso del servicio y únicamente pagará por los días en los que el mismo ha estado activado. Una fórmula muy flexible que, en función de la aceptación que tenga, puede convertirse en una nueva e interesante alternativa por la que es posible que apuestan el resto de las operadoras.

Paga solo por los días que te conectes

Orange ha entendido que los usuarios que tienen una segunda residencia no están interesados en una tarifa que les obligue a pagar una mensualidad completa por un uso que puede ser de unos cuantos días al año. Y que, además, es posible que sean alternos entre sí y que pocas veces se disfrute de meses completos.

Por ello, ha dibujado el servicio 5G en casa en el que únicamente pagaremos por cada día que nos conectemos. La cuota mensual mínima de uso será de 3€ al día y la cantidad máxima que pagaremos a final de mes será de 33€. Además, y con el objetivo de simplificar al máximo el día a día de sus clientes, cuenta con la particularidad de que no requiere de ningún tipo de instalación. Únicamente deberemos conectar el router, introducir la SIM y automáticamente podremos conectarnos a la red. Sin esperas.

El cliente va a tener a su disposición un botón virtual de On / Off a través del área cliente o desde la aplicación de MiOrange. Cuando el botón está en On, se considera que el dispositivo está activo y el coste será de 3€ por jornada. Cuando el botón está en Off, no se podrá hacer uso del servicio y, por ende, no se pagará por el mismo.

¿Una alternativa de futuro?

Pese a que la propuesta de Orange es la más flexible que podemos encontrar actualmente en el mercado, existen más operadoras nacionales que llevan un tiempo tratando de captar la atención de los usuarios que tienen este tipo de necesidades. En el caso de Vodafone, por ejemplo, su servicio de Segundas Residencias Flexibles nos ofrece la opción de contratar bonos de internet por 2, 7 y 31 días, en función del desplazamiento que vayamos a realizar. Todos estos bonos se pueden contratar a través de la aplicación de MiVodafone en unos pocos toques.

Movistar, por su parte, también tiene una opción similar. Aunque en este caso está reservada únicamente para aquellos usuarios que informan a la operadora de su intención de dar de baja su servicio de fibra en una segunda residencia. En este caso, el operador azul ofrece la posibilidad de apagar y de encender la conexión y se factura por días en los que se encuentre activo.

Como se puede comprobar, y pese a que el servicio de Orange es que ofrece una mayor flexibilidad y facilidad en su contratación, otras operadoras ya llevan un tiempo explorando una fórmula muy similar que permita entrar de lleno en el sector de las segundas residencias. Únicamente queda por ver la acogida que va a tener el mismo por parte de sus clientes, que puede provocar interesantes movimientos en el ámbito teleco nacional.