El teletrabajo es una opción muy utilizada en todo tipo de empresas. Los trabajadores que desempeñan sus tareas a distancia, es habitual que busquen lugares desde los que poder desarrollar sus obligaciones. Una situación que ha obligado a algunas cafeterías a tener que limitar el número de usuarios.
El teletrabajo nos permite disfrutar de un extra de flexibilidad para desempeñar nuestras obligaciones laborales. Pese a que muchos de nosotros realizamos las mismas desde casa, es posible que algún día nos apetezca algo de movimiento a nuestro alrededor y optemos por aprovechar esta flexibilidad para trabajar desde una cafetería o restaurante.
Una situación que no debería desprender una gran polémica, si no fuera porque algunas cafeterías prefieren prohibir a perfiles que trabajen desde sus instalaciones para evitar que sus mesas estén ocupadas una mayor cantidad de tiempo del que se considera que es lo habitual. Pero, ¿es legal esta situación?
Sí, es legal
Acudimos al medio especializado Confilegal para obtener la respuesta que estamos buscando. Según apuntan diferentes especialistas consultados por dicho medio, tanto las cafeterías como los restaurantes pueden blindarse de los teletrabajadores prohibiendo el acceso a los mismos, con independencia de que sea de manera temporal durante unas pocas horas o de forma total, basándose en el derecho de admisión que asumimos como normal en otros locales que exigen de un cierto código de vestimenta para entrar, por ejemplo, como es el caso de las discotecas.
Aunque, eso sí es importante que el bar o el restaurante en cuestión justifique su derecho de admisión, obligando a cumplir con criterios que sean objetivos y no discriminatorios. Además, esta información siempre debe estar a disposición de sus usuarios para que pueda ser consultada en cualquier momento.
Criterios flexibles
Como ya hemos mencionado previamente, podemos encontrarnos ante la situación de que el bar o el restaurante en cuestión aplique restricciones únicamente durante una franja horaria concreta, coincidiendo con el momento en el que suelen tener una mayor afluencia de clientes. Por lo tanto, los criterios mencionados previamente pueden ser flexibles y es posible dar la entrada a los trabajadores fuera de las horas pico en las que existe un mayor tráfico de consumidores.
No obstante, que el bar o restaurante flexibilice esta norma implica que la persona que acude con un ordenador a sus instalaciones pueda exigir estar un día entero en el bar a cambio de consumir un refresco o un café. En cualquier momento, los trabajadores de dicho establecimiento pueden solicitarnos que liberemos la mesa para dar paso a nuevos clientes en el caso de que consideren que les estamos causando un prejuicio.
Por tanto, se trata de una medida que es legal, pero que debe estar contemplada en sus condiciones de derecho de admisión. Como medida paralela, siempre podemos buscar algún coworking cerca o, en su defecto, encontrar alguna cafetería que tenga un espacio dedicado para trabajadores en remoto. Una opción que también han optado por incorporar algunos establecimientos y que permite a los teletrabajadores acudir a dicho espacio a trabajar a cambio de una tarifa fija diaria.
