El parabriseado o la acción de parabrisear consiste en colocar folletos o flyers en los parabrisas de los coches. Una actividad que, a día de hoy, continúa realizándose como podemos comprobar en nuestra vida diaria. Además de ser una molestia para los conductores, generalmente requiere la manipulación de un elemento de nuestro vehículo privado como son los limpiaparabrisas. ¿Es legal o ilegal esto?
¿Cuántas veces nos hemos encontrado con la situación de que hemos llegado a nuestro vehículo y en el parabrisas han aparecido todo tipo de carteles publicitarios anunciando diferentes servicios? Esta situación es mucho más frecuente de lo que en un primer momento puede parecer. Pero, ¿es legal dejar publicidad en parabrisas de coches en España? Según hemos podido deducir, depende de la zona, ciudad o provincia, por lo que no siempre es legal hacerlo e incluso con las normativas municipales en mano, no siempre queda tan clara su legislación. Te contamos todos los detalles que debes conocer al respecto.
Normativa sobre publicidad en parabrisas
Más de la mitad de los propietarios de coche en España aparcan en la calle. Lo habitual suele ser que, al regresar al coche, encontremos publicidad de todo tipo. “Compramos tu coche”, “compramos tu piso”, “se hacen mudanzas”, etc. El permiso para repartir este tipo de folletos en los coches lo suele tramitar mediante los ayuntamientos. Es competencia suya al entenderse que el vehículo aparcado en la vía pública es un elemento más de la misma.
A pesar de que sean los ayuntamientos quienes regulen si está o no permitido, hay algunas pautas nacionales. En primer lugar, podemos coger una normativa estatal que marca la regulación sobre publicidad: Ley 34/1988, de 11 de noviembre, General de Publicidad. Esta expresa claramente que no está permitido el parabriseado.
“Artículo 2. Medios de expresión publicitaria no autorizados. c) Reparto o entrega en vía pública de folletos, anuncios, pegatinas o cualquier otra clase de producto publicitario. 2. Se prohíbe la publicidad en cualquier tipo de vehículo o remolque, en circulación o estacionado, excepto la que se realice en los vehículos destinados al transporte público de viajeros”. Esta normativa también puede tener la excepción si los anunciantes son entidades sin ánimo de lucro.
Además, recoge en su artículo cuarto dónde no está permitido y principalmente hacen referencia a recintos históricos o bienes declarados de interés cultural. En cualquier caso, esté o no esté consentido la colocación de publicidad en los parabrisas en un ayuntamiento, la ley dice:
“4. Se podrá disponer la retirada inmediata de forma cautelar de la publicidad que vulnere los principios establecidos en el artículo 3 de la ley 34/1988, de 11 de noviembre, General de Publicidad, con independencia de los procedimientos sancionadores y restantes actuaciones que tramiten los órganos competentes en materia de publicidad”.
Este es por ejemplo el caso de Alcalá de Henares en Madrid. Por ser patrimonio de la humanidad y para favorecer la conservación de monumentos históricos no está permitido la pegada de carteles o colocar folletos en los parabrisas de los automóviles.
Multas relacionadas con esta publicidad
Por mucho que molesten, es un acto incívico y una completa responsabilidad del conductor arrojarlos a la vía pública para deshacerse de ellos. El hecho de tirar estos papeles al suelo puede parecer un gesto inocente, pero si aparece un policía por la zona podría sancionar al conductor con una multa de 120 euros. Ciudades como Madrid han elevado estas sanciones todavía más en su última campaña, con hasta 2.001 euros por arrojar desperdicios. Una buena demostración del impacto que puede llegar a tener a nivel medioambiental.
Por ejemplo, el Consistorio de Ibiza impuso a finales de febrero de 2016 tres multas de 601 euros cada una (1.803 euros en total) al amparo del artículo 10 de la ordenanza de publicidad, que prohíbe colocar propaganda en los parabrisas de varios vehículos estacionados.
Algo que debes tener en cuenta es que no está permitido conducir con papeles en el parabrisas, ni delantero ni trasero. Cualquier objeto que impida la visión completa de lo que nos rodea debe ser eliminado antes de arrancar la marcha. Pese a que muchos conductores piensan que no existe riesgo, podrían llamar nuestra atención si no retiramos los papeles antes de conducir. La multa que tendrías que pagar en este caso sería de un valor de 200 euros. Esta penalización es común para todas las ciudades de España. Por lo tanto, si llegamos a nuestro vehículo y nos encontramos con esta situación, lo mejor que podemos hacer es retirar cualquier posible publicidad que se haya quedado pegada en nuestro parabrisas para evitar cualquier sanción a la postre, pese a no ser culpables del acto como tal.
Poner un cartel de publicidad en mi coche
¿Y qué ocurre si eres tú mismo el que pone un cartel de «Se vende» en tu coche? Quizá te pueda parecer lógico que es algo a lo que tienes derecho, pero lo cierto es que está prohibido. El nivel de la multa que tendrás que pagar por hacerlo dependerá de las leyes que se apliquen en el municipio donde residas. No obstante, no es como para tomárselo a broma, ya que las multas pueden ir desde un mínimo de 200 euros hasta un máximo de 1.000 euros. Lo mejor que podemos hacer en este caso es acudir a las vías convencionales para poder realizar la venta en cuestión.
Este tipo de acciones no se encuentra regida en ninguna normativa, pues estás cometiendo infracciones de actividades ilegales que no ofrecen al consumidor la garantía de que ese coche tenga todo regulado, no sea robado y pueda estar en buenas condiciones. Lo mejor es que este tipo de ventas se lleve a cabo a través de puntos de venta oficiales o por medios digitales dedicados a la venta de coches de segunda mano. De hecho, los expertos en comercio de vehículos afirman que existen grupos organizados que pegan carteles en sus coches con publicidad encubierta, la cual no está permitida en la vía urbana, tanto si tu coche está aparcado como si se encuentra en movimiento.
Por lo tanto, el anuncio de descuentos y promociones con carteles en vehículos propios supone una amenaza contra la ley de comercio impuesta en cada uno de los municipios, considerándolo como un acto ilícito de venta callejera.
El truco que puede salirte caro
La situación de ver un panfleto de publicidad en el parabrisas de tu coche te incita quitarlo de inmediato. Pero, como te hemos comentado anteriormente, debes tener en cuenta que tirarlo al suelo responde a un acto gamberro y si te ve la policía hacerlo puedes llevarte una buena sanción. Por ello, siempre debes tirarlo a una papelera para contribuir al medio ambiente y, si no tienes una cerca, guardarlo dentro del vehículo para posteriormente tirarla en un contenedor que encuentres por el camino.
Pero otro de los hechos más indignos que cometen muchos conductores para librarse de la multa y no querer desprenderse de la publicidad en el momento en que la ven puesta en el parabrisas de su coche, es intentar que el papel se desprenda voluntariamente. De esta forma, el conductor mueve el folleto para que quede más expuesto a ser desenganchado del parabrisas cuando el coche está en movimiento. De esta forma, el viento hará el resto del trabajo para el papel vuele sin dejar rastro. Puede que te hayas salvado de una multa, pero sigue siendo una forma maleducada y grosera de ensuciar el ecosistema.