El pago contactless ha facilitado mucho las compras a los usuarios desde su implementación en los últimos años. Sin embargo, todavía es necesario introducir el PIN cuando la compra supera los 20 euros, a pesar de que hay métodos de seguridad más avanzados. Por ello, una nueva tarjeta que ya está usándose en el mundo real busca simplificarlo todo mucho más usando solo nuestra huella.
Natwest, el banco británico, empieza a probar las tarjetas de débito con lector de huellas de Gemalto
La tarjeta está siendo probada por la entidad bancaria británica Natwest, y combina el uso del pago contactless mediante NFC con nuestra huella dactilar gracias al lector incorporado. En la prueba, donde ya se han seleccionado a 200 clientes que podrán empezar a usarla a partir de mediados de abril, se permitirá realizar pagos sin tener que introducir el PIN ni firmar: tan sólo usando la tarjeta sin contacto con nuestra huella dactilar sobre el lector. El límite de pago (de 30 libras en Reino Unido) no afectará ni obligará a introducir la tarjeta para leer el chip.
El límite de 20 euros es un método relativamente inseguro, ya que permite a alguien con tu tarjeta realizar cobros por esa cantidad sin ningún tipo de verificación. Con la huella, no solo estos pagos quedan protegidos, sino también los que requieren PIN. El PIN puede ser obtenido por una persona mirándote cuando lo introduces a la hora de pagar, mientras que con la huella lo tienen más difícil, obligándoles a recrearla con máxima precisión, lo cual es bastante complicado y al alcance de los ladrones más sofisticados.
Este método es aún más seguro que usar el PIN
Los datos de identificación de la huella se almacenan de manera local en la tarjeta, por lo que un hacker no puede robar esa información a través de la base de datos del banco. La tarjeta ha sido creada por Gemalto, que ya realizó pruebas similares en Italia a finales de diciembre.
Este tipo de pagos usando la huella o la cara es algo bastante común en el pago con los móviles, donde tenemos la tarjeta registrada y solo tenemos que usar nuestra huella para pagar. El problema es que esta tecnología no ha llegado a implementarse en las tarjetas, a pesar de que llevan realizándose pruebas desde 2015.
Registrar cada tarjeta implica también una visita al banco para grabar la huella, mientras que en los móviles se hace de manera más sencilla gracias al lector incorporado. Por ello, Natwest afirma que en el futuro esperan lanzar una versión que permita a los clientes registrar su huella a través del lector de huellas del móvil. El móvil es muy cómodo y es algo que llevamos siempre encima, pero también tenemos que llevar la tarjeta por si nos quedamos sin batería. Por ello, gracias a avances como estos vemos como las tarjetas intentan acercarse a las mejoras tecnológicas que llevan ya años en los móviles.