Se ha presentado hoy como una nueva tarifa de Yoigo, la tarifa Sinfín con 8 GB para navegación por Internet y llamadas ilimitadas con una cuota de 29 euros al mes. Sin embargo, se trata de una actualización de su anterior tarifa, que alcanzaba los 20 GB de datos móviles por el mismo precio. No afecta a los clientes que ya tenían contratadas esas condiciones, pero la pregunta es… ¿por qué han bajado de 20 a 8 GB?
El operador de telecomunicaciones anunció meses atrás la Sinfín con 20 GB como una forma de llevar a la práctica su filosofía, reducir precios en tanto que sea posible. De esta forma, la de TeliaSonera posicionó su Sinfín como la tarifa más competitiva del mercado, si hablamos de la relación entre el ancho de banda y el precio de la cuota mensual. Ahora bien, tiempo después anunció que desaparecería del catálogo y, en varias ocasiones, se prorrogó su disponibilidad hasta que, finalmente, septiembre ha sido el primer mes sin estas condiciones de contratación en su catálogo.
Como ya sabemos, la tarifa Sinfín ha ayudado a Yoigo a crecer en portabilidades netas durante varios meses, pero un excesivo consumo sobre la red de Movistar ha impedido al operador de telecomunicaciones mantener esos 20 GB de la tarifa Sinfín. Al menos, así es como han justificado la desaparición de esta tarifa en su catálogo, que como adelantábamos hoy ha sido relanzada con 8 GB de datos móviles.
Las dependencias de Yoigo son un problema
Con esta respuesta, Yoigo justifica una limitación para poder prestar la tarifa más competitiva del mercado, aunque ha vuelto a dar respuesta a la demanda del mercado, especialmente a los más consumidores de ancho de banda en movilidad, con la misma tarifa y condiciones, salvo por la modificación de 20 GB por 8 GB. La reducción en el ancho de banda, sin embargo, no ha supuesto una rebaja en el precio, luego a fin de cuentas estamos ante una subida de precio si comparamos las condiciones anteriores con las actuales.
Según la justificación de Yoigo que anteriormente desarrollábamos, el pago a Movistar por el alquiler de la infraestructura es el que habría roto las cuentas del operador de «verdad verdadera». En este sentido, Yoigo vuelve a toparse con los límites de Movistar, exactamente igual que les ha ocurrido anteriormente con su modalidad convergente, en la cual dependen del ADSL o Fibra óptica de la operadora de Telefónica.