Esta turbina genera el doble de electricidad que las actuales con olas del mar
En Australia, los científicos del RMIT (Instituto de Tecnología) están investigando sobre posibles formas de obtener más energía a partir del oleaje que se produce en el mar. Para ello, han diseñado una especie de turbina que funciona de forma eficiente y que esperan que se comience a vender para su uso.
Esta turbina cuenta con dos hélices que recolecta el doble de energía que otros prototipos de turbinas similares que aprovechan el movimiento de las olas para obtener energía.
Genera el doble de energía que los sistemas actuales
La idea de obtener energía de esta forma no es nueva. De hecho, tiene un nombre: energía undimotriz. Sin embargo, es ahora cuando diferentes empresas y compañías están usando diferentes mecanismos para obtener energía de esta forma.
Una de las formas más convencionales de sacar energía de las olas es mediante una boya de absorción puntual, que se trata de un dispositivo que flota pero que se encuentra anclado al fondo del mar. Este sistema no para de subir y bajar de forma constante por culpa de las olas, y aprovechando este movimiento se impulsa un convertidor de energía que se encuentra bajo el mar.
Los científicos del RMIT utilizaron como punto de inicio para su investigación ese sistema de boya anclado al mar. Este sistema para recolectar la energía usa una serie de sensores y otros aparatos electrónicos que se sincronizan con precisión con las ondas entrantes. Sin embargo, esto puede producir problemas de fiabilidad, además de que es más fácil que se rompa.
Para evitar estos problemas, se retiraron de esta nueva turbina todos los sensores y se fabricó con una estructura que le permitiera flotar hacia arriba y hacia abajo de forma natural con las olas.
Un sistema simple, rentable y que no contamina
El generador se encuentra dentro de una boya en la superficie que le permite protegerse de la corrosión. Las pruebas demostraron que este sistema era capaz de crear el doble de energía que otros sistemas parecidos desarrollados por otras compañías. Además, se trata de un diseño mucho más simple y más barato de hacer.
La clave es que esta turbina se encuentra sincronizada constantemente con el movimiento de las olas le permite aumentar la cantidad de energía que puede conseguir.
Después de hacer los primeros experimentos en laboratorios, el equipo espera pasar a hacer pruebas más grandes en tanques de agua para después, finalmente, hacer la prueba definitiva en el mismo océano.
Aún es una tecnología que necesita más pruebas y que se tiene que optimizar, pero sin duda es un gran paso en el avance en la creación de un nuevo sistema limpio y rentable del que obtener energía.