Ucrania ha desarrollado un nuevo misil balístico que podría convertirse en una pesadilla para Rusia

Entre algodones y con el máximo de los misterios, así es como está intentando proteger Ucrania el desarrollo de su nuevo misil balístico. La teoría es que no quieren desvelar información concreta sobre el mismo, puesto que no quieren que sus rivales puedan conocer de primera mano en lo que están trabajando. Se trata de un proyecto importante, dado que este tipo de misil balístico no es precisamente frecuente. No hay muchas naciones que dispongan del mismo y, ni mucho menos, es habitual que se fabrique de forma interna. Ucrania podría haber encontrado la pieza del puzle que le faltaba.

Ya se ha probado con éxito

Desde Rusia mencionan que la primera prueba que han realizado de su misil ha sido un éxito. No se extienden mucho más al respecto, pero por el agradecimiento que se ha realizado directamente a la industria de defensa del país y por otros pequeños detalles, se pueden hacer deducciones. La más viable es que este misil balístico se trataría de la versión definitiva del Hrim-2.

Este misil se comenzó a desarrollar hace casi 20 años en un momento en el que el país se encontraba en una situación muy distinta a la actual. Se determinó, en su momento, que era necesario reforzar las defensas de la nación a la vista de que el equipamiento que tenía en su propiedad había quedado obsoleto. Su desarrollo ha sido un secreto guardado a voces durante años y, a final del pasado año, ya se hizo mención a que el modelo original se estaba mejorando. Posiblemente, su desarrollo haya tenido que actualizarse debido a la situación actual y, por otro lado, a que el país se haya encontrado con dificultades en los últimos años para mantener la producción de armamento. Pero ahora, su fabricación podría encontrarse en un estado muy avanzado.

Equipamiento problemático

Ese equipo obsoleto del que hablamos del que dependía Ucrania era, entre otras cosas, el catálogo de vehículos Tochka-U que habían heredado en el final de la Unión Soviética. El problema que quizá no habían anticipado es que la reparación de esos vehículos se encontraba limitada, ya que solo podían llevarla a cabo varias empresas de origen ruso. Una vez iniciado el conflicto, las posibilidades de solucionar los problemas que tuvieran con estos vehículos con sistema de lanzamiento de misiles balísticos se reducirían de una forma máxima. Por ello, el desarrollo del Hrim-2 resultaba fundamental.

La información, como te decíamos, se mantiene en secreto. Pero eso no impide que sepamos que, según los detalles desvelados en entrevistas y varias filtraciones, su potencia podría ser descomunal. Hablaríamos de una carga de explosivos en su cabeza de 480 kg y de un alcance de hasta 500 km, al menos si tenemos en cuenta los datos que han aparecido en medios ucranianos. Si tenemos en cuenta que el alcance del primer Hrim se estipulaba en unos 280 km, no sería raro que se hubiera conseguido esa significativa mejora.

Quedarían muchas dudas al respecto, sobre todo de su capacidad real o incluso de su diseño. Hay algunos rumores que apuntan a que las maniobras que llevó a cabo Rusia en Crimea hace unos años, fue realizando pruebas con este tipo de misiles. No obstante, incluso en esa situación, habrían sido modelos no tan avanzados como el que teóricamente tienen ahora entre manos.

Por las palabras que se han escuchado de líderes ucranianos, este misil podría estar dando gran confianza a su país a la hora de continuar en su combate contra Rusia. A día de hoy, ya han pasado más de dos años desde que se comenzaran las hostilidades, por lo que el conflicto se encuentra en una situación en la que, ambas partes, necesitan recurrir a nuevas armas. Ucrania, después de las mejoras en abastecimiento y capacidad de fabricación que ha tenido en los últimos tiempos, parece que está recortando distancias. Producir un misil balístico como este podría llegar a cambiarlo todo en la batalla.