La conexión WiFi lleva disponible desde hace más de una década en España, posibilitando la conexión inalámbrica al Internet fijo con nuestros móviles, ordenadores y todo tipo de dispositivos. Al ser inalámbrica y transmitirse por el aire, cualquier dispositivo cercano puede recibir la señal, por lo que es primordial que ésta vaya cifrada con la mayor seguridad posible para evitar que cualquier persona pueda conectarse a ella.
WEP: el culpable de que muchos routers todavía sean inseguros
En la actualidad, para proteger las contraseñas WiFi se utiliza el protocolo WPA-PSK y sus actualizaciones como WPA2-PSK, que introdujo el cifrado AES. Utilizar este método de protección nos asegura que nuestra red va a estar protegida ante hacks, y por ello desde hace ya al menos 5 años todos los routers nuevos lo utilizan por defecto en lugar de WEP, y la mayoría ya ni incluyen WEP como opción para cifrar la contraseña.
WEP fue el primer sistema de protección que utilizó el WiFi, y su seguridad era (y es) muy deficiente, pudiendo hackearse por diversos métodos, tardando un método normal de fuerza bruta no más de 20 o 30 minutos. Por desgracia, todavía quedan muchos routers en nuestro país que utilizan este sistema de protección, haciéndolos vulnerables ante cualquier avezado usuario que sepa quebrantar esta protección.
En concreto, un estudio de la ONTSI (Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información) ha descubierto que todavía el 22,5% de las redes WiFi españolas utilizan cifrado WEP, el cual, como comentábamos, está obsoleto y es fácilmente vulnerable.
Riesgos que genera tener una red WiFi insegura
El hecho de que haya alguien con acceso a tu red tiene varios efectos más allá de que pierdas ancho de banda. Por ejemplo, al conectarse alguien a tu red, puede acceder a todas las carpetas compartidas de tu ordenador, así como incluso robar datos privados con diversos métodos de ataque.
El estudio revela también que el 12,3% de los encuestados cree que puede haber algún intruso en su red WiFi, y lo que es peor, el 26% no sabe qué cifrado está utilizando, y el 5,4% la tiene directamente abierta sin ningún tipo de cifrado.
Además de la protección en la red WiFi de nuestro hogar, el estudio muestra que el 39,2% de los usuarios se conecta a cualquier red WiFi abierta que se encuentran, sin comprobar la legitimidad de esa red. Por si fuera poco, durante esa navegación los usuarios no tienen en cuenta la sensibilidad de los datos que circulen por ella, como contraseñas sensibles del correo electrónico, redes sociales o banca online.
En definitiva, desde ADSLZone recomendamos que reviséis la seguridad de vuestro router, y comprobéis que estáis utilizan protocolo WPA o WPA2 para proteger vuestra contraseña. Para ello, tenéis que entrar en la configuración de vuestro router a través de la IP local 192.168.1.1, e ir al apartado de WLAN, y en Seguridad, cambiar la protección a la más avanzada que encontréis. Si tenéis cualquier duda, podéis consultar nuestro Foro de Redes y WiFi.