Goophone, fabricante conocido por sus imitaciones de los terminales de Samsung y Apple, entre otros, ya ofrece el primer clon del Galaxy S5, tan solo dos días después de su presentación por un precio de 220 euros al cambio. Conoce todas las características del smartphone.
El fabricante chino ha sido el primero en revelar una copia del nuevo buque insignia de Samsung. Apenas transcurridos dos días desde la presentación oficial del terminal en el Mobile World Congress de Barcelona, ya está disponible toda la información sobre este terminal de imitación que se une a la lista de smartphones de Goophone. El aspecto parece muy logrado, aunque como es lógico, las especificaciones tienen poco que ver con el original.
Goophone S5, así es como ha sido bautizado este terminal que cuenta con una pantalla más que decente de 5 pulgadas con resolución Full HD. Las dimensiones y el peso son los únicos apartados que aún no están indicados en la descripción del producto aunque por el tamaño de la pantalla y el diseño que muestran, deberían de aproximarse a las del Galaxy S5 original.
El procesador, otro de los aspectos importantes es un Octa-Core MTK MT6592 que alcanza velocidades de reloj de hasta 2 GHz y la GPU es la Mali450-MP4. Lo acompañan 2 gigas de RAM que en este caso, sí igualan a los que sorprendentemente incluye el nuevo smartphone de la compañía de Corea del Sur. El almacenamiento por su parte, es de 32 gigas ampliable mediante tarjetas MicroSD.
Según cuentan en la propia descripción, el SoC está totalmente optimizado para sacar el máximo partido del conjunto del sistema. A diferencia de otros procesadores de ocho núcleos, solo activa la mitad de éstos para ahorrar batería para uso normal, pero los pone todos a trabajar en momentos en los que la exigencia de rendimiento es máxima, ofreciendo máxima calidad en la visualización de vídeos y ejecución de juegos.
La cámara de 13 megapíxeles con flash LED, aunque lejos de alcanzar la calidad del dispositivo primitivo y contar con las funcionalidades de este, permite capturar fotos aceptables. La cámara frontal, de 5 megapíxeles. La batería, otro de los aspectos claves es igual que la del Galaxy S5, de 2.800 mAh aunque garantiza sólo 6 horas de conversación y 48 en espera.
El apartado de conectividad, de los más delicados, encontramos que es compatible con redes WiFi 802.11 b/g/n y dispone de conexión 3G HSPA+, pero no 4G LTE. Trabaja en las bandas de frecuencias GSM 850/900/1800/1900 MHz y WCDMA 850/2100 MHz, por lo que es compatible parcialmente con las redes de España dónde se utilizan las bandas 900/2100 . Por último, está disponible en los mismos colores que el smartphone de Samsung: Blanco, negro, azul y el nuevo dorado. El precio, como decíamos, 220 euros.
¿Qué os parece este clon?