No siempre que queremos ver una película tenemos mucho tiempo para dedicarle. Aunque algunas duran hasta tres horas, quizá no quieres pasar (o no puedes) más de noventa minutos delante del televisor. En ese caso, podemos encontrar muchas películas de menos de hora y media sea cual sea el género que nos interesa o el tipo de persona que va a verla.
A la hora de elegir película no solo importa la temática o la plataforma de streaming donde verla sino que también importa cuánto va a durar. Bien porque no tengas demasiado rato o simplemente porque no tienes ganas de pasar más de dos horas en el sofá. En ese caso, podemos buscar películas cortas de acción, películas cortas de terror, de dibujos, etc. Y aquí van algunas opciones que puedes tener en cuenta cuando necesites elegir una.
De acción: Lucy
Interpretada por Scarlett Johansson, Lucy es una joven que se dedica a transportar droga y a ejercer de mula. Pero un accidente en uno de sus transportes provocará que la bolsa de la potente droga que lleva en su interior se rompa. Un suceso que hará que adquiera poderes sobrenaturales y todo tipo de habilidades extraordinarias que le harán ser invencible.
Un clásico: La Princesa Prometida
No dura menos de hora y media pero solo lo sobrepasa por cuatro minutos y es uno del os grandes clásicos e imprescindibles. Sabemos de sobra eso de “soy Iñigo Montoya, tú mataste a mi padre, prepárate para morir” y nos conquista un cuento de hadas en la que no faltan las peleas que disfrutábamos hace treinta años. La Princesa Prometida es un cuento medieval, un cuento de hadas en el que Westley volverá a casa para casarse con Buttercup, a la que ha jurado amor entero. Pero para llegar a ese amor prometido tendrá que enfrentarse a todo tipo de enemigos. Por su parte, Buttercup tendrá que soportar a un insoportable príncipe Humperdinck que pretende casarse con ella aunque su corazón sigue siendo de Westley.
Además, no falta una gran banda sonora con Mark Knopfler (Dire Straits) como protagonista y que fue nominada al Oscar como mejor canción original.
Ver La Princesa Prometida en Amazon Prime Video
De miedo: REC
Si quieres una hora y medio de agarrarte al sofá y pasar miedo, REC es una opción. La primera de varias películas disponibles, una cinta dirigida por Paco Plaza y Jaume Balagueró que nos meterá de lleno en una historia de terror y supervivencia. Una joven reportera graba en directo a un equipo de bomberos para mostrar su día a día. Lo que aparentemente es un rescate sencillo de una anciana que ha quedado atrapada en casa, se convertirá en el reportaje más terrible y terrorífico jamás emitido por televisión.
De dibujos animados: Toy Story
Entre las mejores películas de animación de la historia está Toy Story. Y una de esas cintas que te permiten hacer una sesión de cine sin gastar demasiado tiempo. Menos de hora y media. Disponible en Disney+ como inicio de una saga de películas que comenzó hace décadas, podemos ver a los juguetes más populares de la gran pantalla viviendo todo tipo de aventuras cuando su dueño Andy sale de la habitación. Ideal para ver con los más pequeños.
Para ver en familia: El día del sí
Si buscas una comedia corta para ver en familia y que no hayas visto antes, en Netflix puedes ver “El día del sí”. No es una de las mejores películas que vas a ver en tu vida pero una cinta entretenida y amena para un rato de domingo. Allison y Carlos son un matrimonio que sienten que pasan toda su vida diciendo que no. Así que decidirán que haya un día en el que solo digan que sí. Durante 24 horas, dirán que sí a todo lo que digan sus hijos. Con las locas consecuencias que todo esto va a conllevar para la familia y la aventura que empezarán a vivir todos juntos.
Comedia: La vida de Brian
Otra buena opción es apostar por los clásicos, que nunca pasan de moda. La vida de Brian fue una auténtica revolución cuando se estrenó, con grupos que intentaron prohibir su exhibición en cines. Una parodia que presenta a Brian, un judío que nace el mismo día que Jesús y que acaba siendo confundido con el Mesías ya de adulto. Una comedia divertidísima y sarcástica, con toques de humor clásicos de los Monty Python, narra las desventuras de Brian, quien choca con la ocupación romana y se ve envuelto en una persecución con tintes religiosos de la que él no quería saber nada y con un final antológico al ritmo de Always look on the bright side of life, la canción más conocida del grupo humorístico británico.