WhatsApp es una de las aplicaciones que no suele faltar hoy en día en ningún smartphone. Y es que se ha convertido en la app más utilizada para comunicarnos con familiares, amigos o compañeros. Por lo tanto, quien más y quien menos tiene ciertos chats en los que ha mantenido alguna conversación privada a la que no quiere que nadie tenga acceso o en los que hemos compartido algún dato confidencial. Por eso, es importante tomar medidas lo antes posible para proteger estos chats. Esto es todo lo que podemos hacer para proteger nuestras cuenta de WhatsApp y evitar que alguien nos la pueda robar y hacerse pasar por nosotros.
Lo cierto es que en la mayoría de los casos solemos ser bastante confiados y no nos importa meter la contraseña, PIN o patrón de desbloqueo del móvil delante de cualquiera, pero sin duda, esto supone un gran riesgo, ya que nuestro móvil puede caer en cualquier momento en manos de alguien y pueda acceder a toda la información almacenada en él. Por lo tanto, es recomendable tomar las medidas oportunas cuanto antes y así evitar que cualquier pueda tener acceso a nuestro WhatsApp o incluso que consigan robarnos la cuenta.
Cómo proteger tu cuenta de WhatsApp
No compartir el código de verificación con nadie
En el momento que realizamos la instalación de WhatsApp en un smartphone, después de indicar nuestro número de teléfono, la propia app de mensajería nos enviará un SMS con el código de verificación. Un código de 6 dígitos que debemos introducir en la pantalla de verificación de la app y que es único. Es decir, si en algún momento queremos instalar WhatsApp en otro teléfono o queremos cambiar de número, tendremos que activar de nuevo la aplicación a través de otro código de verificación que nos volverá a enviar por SMS.
Por lo tanto, debemos evitar que cualquiera pueda tener acceso a dicho código. Una vez que hayamos instalado la app de mensajería y comprobemos que se ha instalado y activado todo correctamente, quizás lo mejor es que borremos el SMS que contiene dicho código para que nadie pueda tener acceso a él aunque nuestro teléfono caiga en sus manos.
Activar la verificación en dos pasos de WhatsApp
Una función que ha añadido el propio servicio de mensajería con el propósito de aumentar la seguridad en WhatsApp es la verificación en dos pasos. De esta manera, será necesario indicar un PIN cuando volvamos a registrar nuestro número de teléfono en la aplicación de mensajería. Es decir, si alguien con nuestro código de verificación intenta instalar y verificar la aplicación sin que nos demos cuenta, la herramienta le solicitará este PIN para poder seguir con el proceso. En caso contrario, no podrán acceder a nuestra cuenta de ninguna manera.
Para añadir la verificación en dos pasos:
- Abrimos la app en nuestro móvil.
- Tocamos sobre el botón de menú.
- Accedemos a Ajustes > Cuenta > Verificación en dos pasos.
- Tocamos sobre la opción Activar.
- Introducimos un PIN de 6 dígitos que nos pedirá cuando registremos nuestro número en WhatsApp.
- Confirmamos nuevamente el PIN.
- Añadimos nuestra dirección de correo electrónico. Será con la que podemos recuperar el PIN en caso de que lo olvidemos, por lo que debe ser una dirección de correo válida a la que tengamos acceso puesto que será necesaria para recuperar el PIN si lo olvidamos.
- Confirmamos la dirección de correo.
- La verificación de dos pasos quedará activada.
Es importante saber que si tenemos activada la verificación en dos pasos y no tenemos el PIN, tendremos que esperar siete días sin usar WhatsApp para que nuestro número se pueda verificar otra vez. Por lo tanto, si olvidamos el PIN pero no facilitamos una dirección de correo para desactivar la verificación en dos pasos, no podremos verificar nuestra cuenta nuevamente sin esperar esos siete días.
Si han pasado 30 días desde que se uso la app de mensajería por última vez, sin nuestro PIN, y verificamos nuestro número de nuevo, la cuenta será eliminada. Ahora bien, podremos crear una nueva, verificar el número y establecer un nuevo PIN sin problemas.
Poner PIN, patrón o huella dactilar
La primera barrera que podemos poner para proteger el acceso a la información almacenada en nuestro teléfono móvil es proteger el acceso al mismo. Por lo tanto, es recomendable establecer un PIN, patrón de bloqueo o usar algún sistema biométrico como la huella dactilar, el reconocimiento facial o reconocimiento de iris para desbloquear nuestro smartphone. Aunque también es posible bloquear WhatsApp con la huella dactilar de forma nativa desde los ajustes de la propia app.
Por supuesto, el método a elegir dependerá de las capacidades de nuestro teléfono móvil, pero lo cierto es que a día de hoy, en todos los teléfonos podemos poner un PIN, patrón e incluso huella dactilar para desbloquear nuestro móvil. Una de las más utilizadas es el bloqueo con huella dactilar. De esta manera, tendremos que poner el dedo sobre el lector de huellas de nuestro teléfono para acceder a la app de mensajería. Para activar esta opción:
- Abrimos la app de mensajería.
- Tocamos sobre el botón de menú.
- Accedemos a Ajustes > Cuenta > Privacidad > Bloqueo con huella dactilar.
- En la siguiente pantalla deslizamos el interruptor Desbloquear con huella dactilar a la posición ON.
- Ponemos el dedo sobre el lector de huellas y seguimos las instrucciones.
Asegúrate de no tener otras sesiones abiertas
Si usamos WhatsApp Web, debemos asegurarnos que no dejamos ninguna sesión abierta, sobre todo si a ese ordenador tienen acceso otras personas. Por lo tanto, si vamos a dejar de usar la versión web de la app de mensajería, lo mejor es que cerremos la sesión antes de nada. Para ello:
- Pulsamos sobre el botón de menú en WhatsApp Web y elegimos la opción Cerrar Sesión.
- Desde nuestro móvil, tocamos sobre la notificación que muestra que WhatsApp Web está activo y pulsamos sobre la opción Cerrar todas las sesiones.
Qué hacemos si nos roban la cuenta de WhatsApp
Si sospechamos que alguien puede estar usando nuestra cuenta de WhatsApp, lo primero de todo será avisar a nuestro familiares y amigos de que alguien se podría estar pasando por nosotros en la app de mensajería y a continuación, tratar de recuperar nuestra cuenta lo antes posible.
Para recuperar nuestra cuenta, estos son los pasos a seguir:
- Nos registramos de nuevo en WhatsApp con nuestro número de teléfono.
- Verificamos el número introduciendo el código de 6 dígitos que recibiremos por SMS. Una vez que se verifique, la sesión de la persona que está usando nuestra cuenta se cerrará automáticamente.
- Completamos la configuración de la cuenta y ya podremos usarla nuevamente.
Si nos encontramos con que al verificar nuestro número de teléfono se nos solicita un código de verificación en dos pasos y nosotros no lo teníamos activado, significa que la persona que nos robó la cuenta de WhatsApp lo activó posteriormente. En este caso, tendremos que esperar siete días para poder verificar nuestro número sin este código.
Riesgos de que alguien nos robe la cuenta
Como podemos ver, si no extremamos las precauciones y nos preocupamos por proteger nuestra cuenta de WhatsApp, podemos ver cómo alguien se hace dueño de ella. Un simple descuido o el hecho de que nuestro móvil caiga en manos de alguien sin que nosotros estemos presentes puede hacer que esa persona u otra a la que esa misma le facilite cierta información pueda entrar en nuestra cuenta de WhatsApp.
Esto significa que podrá enviar mensajes a cualquiera como si fuésemos nosotros mismos y sin que los destinatarios puedan saber que no somos nosotros los que estamos escribiendo esos mensajes sino que es otra persona la que está controlando nuestra cuenta. Por suerte, gracias al cifrado de extremo a extremo y que los mensajes se almacenan en nuestro dispositivo, si alguien accede a nuestra cuenta de WhatsApp desde otro teléfono, no podrá acceder a las conversaciones anteriores.
Además, de poder enviar mensajes a quien quiera con nuestro número de teléfono a través de la popular app de mensajería, podrá hacerse pasar por nosotros con nuestros familiares y amigos, suplantando nuestra identidad.
Eso por no hablar de la posibilidad de que esa persona distribuya mensajes con virus o estafas de forma masiva para tratar de robar otras cuentas o ciertos datos confidenciales de otras personas, lo que podría suponer un problema a nivel legal.