La Asociación Española de Operadores de Telecomunicaciones, Redtel, ha mostrado sus propuestas para fijarla estrategia de España para alcanzar los objetivos de la Agenda Digital para Europa. Entre ellas pide que se reduzca la carga tributaria al sector e incentivos fiscales para impulsar el despliegue de redes de nueva generación.
La respuesta de Redtel en el marco del proceso de consulta pública sobre la propuesta de Agenda Digital para España (ADE) no se ha hecho esperar. La asociación ha valorado de forma muy positiva la propuesta inicial para la ADE y han querido puntualizar algunos aspectos de la misma con el objetivo de «profundizar en estos aspectos para facilitar su implementación y posterior seguimiento».
Si bien uno de los objetivos de la ADE pasa por el fomento de las redes de banda ancha de alta velocidad, Redtel considera que hay que «revisar y reducir la actual carga fiscal del sector para dar un mayor impulso a la inversión». «Es importante señalar que actualmente la mitad de los beneficios de los operadores de telecomunicaciones se destina al pago de tributos estatales, autonómicos y locales, lo que supone que la carga fiscal del sector es superior en España en comparación con otros países de nuestro entorno como Alemania, Italia o Reino Unido», explica la asociación.
«Consideramos urgente que se eliminen aquellos tributos que resultan claramente arbitrarios e injustificados como son la aportación para la financiación de RTVE, la tasa por utilización del dominio público exigida a los operadores móviles y los impuestos medioambientales autonómicos», señala el comunicado de Redtel.
Además, la asociación de operadores, cuyos socios son Ono, Orange, Telefónica y Vodafone, pide que se contemple «la introducción de incentivos fiscales al despliegue de redes ultrarrápidas fijas y móviles». Entre ellas estarían las «ayudas a la renovación de las infraestructuras comunes en el interior de edificios«, de modo que la expansión de la fibra óptica en los hogares españoles por parte de los operadores se vea incentivada. En este sentido ejemplifica con la medida anunciada en Brasil que ofrece «un plan de incentivos fiscales para el despliegue de banda ancha que prevé la anticipación hasta el 2016 de inversiones por un total de 8.900 millones de dólares al desgravar una serie de impuestos para el despliegue de redes de telecomunicaciones de banda ancha».
Por otro lado, desde Redtel también se ha hecho un llamamiento a «todos los grupos políticos» para que apoyen «la modificación de la Ley General de Telecomunicaciones» que buscaría «resolver los numerosos obstáculos administrativos que existen para el despliegue de redes y establecer un marco adecuado que de certidumbre y favorezca la inversión privada en el sector».Su objetivo es que ésta sea realidad «en el plazo máximo de un año«.