La industria del cine se opone a que los usuarios recuperen archivos de Megaupload

Uno de los principales impulsores del cierre de Megaupload, la asociación que engloba a las grandes compañías cinematográficas, se ha pronunciado sobre la polémica en torno a la devolución de los archivos que albergaba la plataforma de descargas. Su postura es firme: no quiere que los usuarios recuperen sus contenidos.
Hace apenas unas horas nos hacíamos eco de la situación en la que se encontraba un periodista estadounidense tras el cierre de Megaupload. La intervención de las autoridades federales de Estados Unidos propició que perdiese importantes documentos necesarios para ejercer su trabajo y, consecuente, tuvo un impacto económico negativo en su negocio. Todo ello sin incumplir ninguna ley. Por este motivo, ha recurrido a los tribunales del país norteamericano exigiendo la devolución de sus archivos antes de que Carpathia, la empresa de hosting que los alberga, acabe borrándolos al no recibir los pagos de la bloqueada Megaupload.
Dicha compañía asegura que almacenar los 25 petabytes de información le supone un coste de 9.000 dólares al día por lo que ha urgido a encontrar una pronta solución a las partes implicadas con el fin de dejar de asumir ese coste. El equipo de abogados de Megaupload ya está negociando para intentar hallar una solución. De su lado están los miles de usuarios afectados, que reclaman los archivos que les pertenecen y cuyo contenido no es sinónimo de infracción de los derechos de autor en la totalidad de los casos.
Firme oposición de la MPAA
Sin embargo, tras conocerse la intención de Carpathia de vender sus contenidos a Megaupload, la MPAA (asociación que reúne a las grandes compañías de la industria de Hollywood) ha puesto el grito en el cielo. «La venta o transferencia de los servidores a Megaupload o a sus defensores incrementaría notablemente el riesgo de que Megaupload trasladase los servidores y equipos con contenido infractor a una jurisdicción extranjera y relanzase este servicio ilegal«, aseguran representantes del sector.
Así pues queda patente el miedo que existe en las grandes compañías a que Megaupload renazca en forma de empresa renombrada. En su opinión, si se permite esta posibilidad se estaría dando legalidad a lo que consideran una práctica delictiva. La MPAA afirma amparándose en la Ley de la Propiedad Intelectual que «como estos servidores contienen algunas de sus obras protegidas con derechos de autor transferirlos supondría una distribución no autorizada al público«.
¿Qué derecho tienen estas compañías a evitar que los usuarios recuperen sus contenidos? ¿Acabará cediendo la Justicia del país norteamericano a sus presiones para impedir que se devuelvan los archivos? Por ahora el Gobierno estadounidense ha preferido ignorar toda propuesta de devolución como la que se realizó desde España, por lo que mucho nos tememos que no sería nada descartable que los archivos fuesen borrados de forma definitiva para indefensión y frustración de miles de usuarios.