Desde los bancos Santander y BBVA ven posibilidades en la hipotética compra de Jazztel por parte de Vodafone. Se trata de una operación que ya ha sonado con fuerza en las últimas semanas y que supondría un fuerte desembolso por parte de la compañía británica.
Hace unas semanas os informamos sobre el posible interés de Vodafone por adquirir uno de los grandes operadores de banda ancha del país para consolidar su presencia en este mercado en España. En la actualidad se encuentra por detrás de Orange y Jazztel dentro del segmento de operadores alternativos a Movistar. Si tenemos en cuenta la imposibilidad de adquisición sobre el histórico ni sobre el operador naranja, uno de sus grandes rivales a nivel europeo, Jazztel queda como la opción más viable.
Esta opción de compra ya ha sido contemplada por los inversores desde hace tiempo ante las dificultades para asentarse en el mercado fijo. Sin embargo, la compañía cuenta con una capacidad y flexibilidad financiera que no tienen sus rivales dada su elevada deuda por ahora, por lo que Vodafone podría optar por el crecimiento a través de la compra de la firma presidida por Leopoldo Fernández Pujals.
Recientemente, el CEO de Vodafone en España, Antonio Coimbra, señaló en el marco del Mobile World Congress de Barcelona que tienen sobre la mesa una opción de estas características sin hablar expresamente de la compra de Jazztel. Aunque prefirió enfocar su discurso a la petición de una regulación más flexible en el sector, resulta llamativo que no renegase de esta opción. No en vano, algunos analistas la contemplan con fuerza.
Como leemos en CincoDías.com, los análisis de los bancos Santander y BBVA ven esta posible adquisición cada vez más cercana. La operación dispararía sus títulos más de un 50% (hasta los 9 euros por acción) ante la gran envergadura que supondría. Los analistas creen correcta la compra porque Jazztel cuenta con unas condiciones envidiables dados sus grandes resultados con ganancias superiores a las previstas, su crecimiento en el mercado móvil y, lo que parece aspecto clave, sus futuros ingresos al adentrarse en el sector de la fibra óptica.
Otras corporaciones como Citi, Bankia, JB Capital, Raymond James, Berenberg o Ahorro Corporación también se unen a esta corriente de opinión, no secundada por JP Morgan, que es más cauta. Así pues, la postura parece casi unánime y podría animar a Vodafone a seguir un camino que los analistas ven con más ventajas que inconvenientes y que supondría un fuerte movimiento en el mercado de las telecomunicaciones español, tranquilo en este sentido en los últimos años.