Normalmente cuando actualizamos nuestro terminal a la última versión del sistema operativo, esperamos encontrarnos nuevas características y problemas corregidos. Las últimas actualizaciones de iOS y Android han traído problemas con el WiFi, el 3G y la batería a los terminales de la gama Nexus y a los iPhone de Apple.
Siempre esperamos encontrarnos novedades y problemas resueltos en cada actualización que aparece para nuestro smartphone. Cada vez es más habitual que las últimas versiones generen problemas que antes no existían. Ha pasado en algunas ocasiones con iOS de Apple y ahora está pasando también en Android. iOS 6.1 tiene problemas con la conectividad 3G y el consumo elevado de batería. Android 4.2 está provocando problemas con la red WiFi en todos los terminales de la gama Nexus.
iOS 6.1, dificultades para conectarnos a la red
La última actualización de iOS está generando problemas con la conectividad 3G y con la batería en el iPhone, según leemos en SmartZona. Se están registrando problemas a la hora de realizar llamadas, enviar mensajes de texto y acceder a la red de datos. Desde Reino Unido aseguran que Apple ya se encuentra trabajando en una actualización que corrija estos problemas. También se ha notado un aumento del consumo del terminal y sobrecalentamiento de la batería. Algunos usuarios aseguran que la autonomía se ha reducido en un 35 por ciento.
Nexus y Android 4.2, desconexiones constantes de la red WiFi
Como podemos leer en AndroidAyuda, los problemas WiFi afectan a los Nexus actualizados a la versión 4.2 de Android. En un hilo del sitio Android Code se han registradonumerosas quejas relacionadas con la conexión WiFi de todos los terminales de la gama Nexus. Los dispositivos Nexus 4, Nexus 7 y Nexus 10 sufren desconexiones aleatorias cuando hacen uso del WiFi. Por ahora, desconocemos si Google está trabajando para solucionar estas incidencias.
Es bastante preocupante el número de problemas que traen las nuevas versiones de los sistemas operativos para móviles. Creemos que las compañías deberían probar más en profundidad estas actualizaciones para evitar problemas tan desagradables como los vistos en iOS 6.1 y Android 4.2.