Cuando nos referimos a las exitosas plataformas de vídeo a la carta que tanto juego están dando en los últimos años, casi siempre solemos hablar, en cuanto a sus contenidos, de las series y películas de producción propia que estas intentan que tengan una enorme aceptación entre el gran público.
Cierto es que se pretende que estos contenidos propios sean uno de los bastiones de firmas como Netflix, HBO, o Amazon, ya que les sirven para desmarcarse del resto y lograr una exclusividad con la que llamar la atención de más potenciales clientes suscritos. Esto es algo que ya hemos podido comprobar, de un modo u otro, con varios títulos, pero también hay que admitir que las producciones de terceros igualmente juegan un papel muy importante en estos servicios online, y lo van a seguir jugando.
Sin embargo y con ese claro objetivo de dar prioridad a los contenidos propios, plataformas como Netflix intentan promocionar por todas las vías esos contenidos que han sido producidos por la propia empresa, por lo que los «externos» podrían verse un tanto desplazados, por decirlo de algún modo. Por tanto, lo que ahora están intentando conseguir es promocionar sus productos a su manera para que de ese modo se conviertan en importantes éxitos dentro de Netflix, lógicamente.
A casi nadie se le ha escapado, por poner un ejemplo, la enorme inversión en marketing que la propia Netflix ha llevado a cabo para promocionar la tercera temporada de Stranger Things, privilegios que ni por asomo disfrutan otras series, y menos si son de terceros. Es por ello que el resto parece que van a tener que ingeniárselas por su cuenta y riesgo, como ha sucedido, por ejemplo, con el productor de la ahora exitosa serie Norsemen.
Seguro que muchos de vosotros ya os habréis dado cuenta de que cada vez que accedemos a la aplicación oficial de Netflix, nos encontramos con una promoción muy atractiva en primer plano para una de sus serie o películas, promoción que llega a ser hasta molesta para muchos. Esta cabecera que nos da bienvenida cambia cada cierto tiempo, pero generalmente se refiere a contenidos propios de la plataforma de vídeo.
Así logró situar el productor de Norsemen situar en lo alto a su serie en Netflix
Claro está, este es un movimiento que, aunque molesto, supone una excelente promoción para determinadas películas o series que a la empresa le interesa que veamos, ya que llega a una enorme cantidad de suscriptores, lo quieran, o no. Debido a que ahora Netflix ha entrado en una espiral en la que prefiere cancelar series que quizás no enganchan a suficientes espectadores y apostar por las nuevas, tiene muy en cuenta qué es lo que va a mostrar y promocionar en estas portadas.
Pero claro, el espacio para ello es un tanto limitado, por lo que un productor dio con la manera de asegurarse de que su serie tuviera algo similar a ese protagonismo en las aplicaciones oficiales. En concreto nos referimos a Anders Tangen, que vendió su comedia vikinga Norsemen a Netflix en el pasado año 2017. Debido a que esta es una serie que se adquirió a otro país que originalmente la emitió en una cadena noruega, en principio Netflix no iba a poner un especial interés comercial en la misma como ha venido sucediendo con algunas de sus series originales, como hemos explicado.
Y es que debido a la enorme disponibilidad de vídeos que ofrece Netflix a sus usuarios, la competencia para destacar es muy dura, por lo que unas semanas antes de que Norsemen debutara en el servicio streaming, Tangen y sus socios de producción tomaron una decisión. Esta no fue otra que gastar alrededor de 18.500 dólares en anuncios de Facebook, especialmente en aquellas ciudades americanas con gran tasa de población noruega. Estos eran anuncios que mostraban tráiler de la serie y enlaces al sitio web de la misma. Aunque sencilla, la estrategia pareció funcionar, ya que más de cinco millones de usuarios de Facebook vieron estos anuncios y unos 6.000 vieron la serie en la plataforma.
Algunos productores tendrán que buscar vías alternativas para promocionar sus contenidos
Al mismo tiempo a partir de ahí parece que el “boca a boca” también ayudó, llevando a más gente a ver el contenido e incitando al algoritmo de Netflix a colocar a Norsemen en el carrusel de recomendaciones. Un poco más más tarde Tangen gastó otros 15.000 dólares para promover su contenido fuera de los Estados Unidos, por lo que poco después de su puesta en escena en la plataforma como tal, la serie comenzó ya siendo un éxito, tal y como se comunicó a los productores de la misma.
Llegados a ese punto, a estos productores ya les debería resultar un poco más fácil atraer a los espectadores para las próximas temporadas, con lo que tras el éxito de la primera, Netflix ya rebautizó Norsemen como una “Netflix Original”, asegurándose así que le acompañase la máquina de marketing de la compañía. Decir que en estos momentos la tercera temporada ya se encuentra en producción, algo que no han logrado otras muchas como la recientemente cancelada, y admirada por muchos, The OA.
Aunque en un principio pueda parecer un tanto descabellado que los productores tengan que gastar de sus propios bolsillos para tratar de encontrar espectadores en plataformas como Netflix, lo cierto es que la inversión en marketing de la plataforma streaming es limitada, por lo que no todos sus proyectos pueden disponer de campañas como la mencionada de Stranger Things, por ejemplo.
De igual modo lo logrado por Tangen y Norsemen no va a funcionar siempre en todas las series, obviamente, pero seguro que no son los últimos que lo intentan.
