El iPhone X se ha puesto hoy a la venta de manera oficial, aunque algunos usuarios que lo habían comprado online ya lo estaban recibiendo. Con ello ya hay varias personas y webs aventurándose a ver qué esconde el móvil por dentro, y nada más quitar la tapa trasera han descubierto una interesante peculiaridad: en iPhone X no tiene una batería en su interior, sino dos.
El iPhone X tiene un 49% más de batería que el iPhone 8 en prácticamente el mismo tamaño
El iPhone X tiene prácticamente el mismo tamaño que el iPhone 8 (su tamaño equivale al que tendría un iPhone 8 de 5 pulgadas), pero equipando una pantalla de 5,8 pulgadas. Sin embargo, la diferencia de batería entre ambos móviles es abismal. Mientras que el iPhone 8 tiene sólo 1821 mAh, el iPhone X equipa una batería de 2716 mAh, un 49% más. Además, es ligeramente más grande que la del iPhone 8 Plus, que tiene 2691 mAh.
Esto ha obligado a Apple a tener que hacer malabares para poder incorporar una batería que nutra a una pantalla de tal tamaño. Por ello, además de empaquetarlo todo al milímetro en su interior, han tenido que dividir la batería en dos partes para poder disponerla en forma de L y aprovechar aún más el espacio libre en su interior.
Las baterías son dos módulos diferentes que están intercomunicados entre sí por un cable, siendo esto la primera vez que ocurre en un iPhone. Los pull-tabs que se usan para poder despegar la batería del chasis están ahora pegados en los bordes de la batería en lugar de en la parte superior, lo cual hace algo más complicado sacarlas también.
Dividir la batería en dos partes permite una mayor creatividad a la hora de colocar la batería una vez se han dispuestos los demás elementos en el móvil. iFixit ya ha publicado el desmontaje del iPhone X en su página web, donde han detallado todo el proceso. Para abrir el móvil, éste se hace de lado como en los últimos iPhone (desde el 7 Plus es así).
iFixit ya ha hecho su despiece, y nos muestra interesantes datos
Junto con la batería, lo que más destaca iFixit es el diminuto tamaño de la placa base. Ésta tiene el 70% de las dimensiones de la del iPhone 8 Plus, lo cual ha dejado mucho más sitio para la batería. El truco que Apple ha usado para hacer esto es doblar la placa por la mitad. Si se despega y despliega, ésta ocupa un 135% del espacio de la del iPhone 8 Plus. Como principal desventaja para los usuarios, este diseño hace prácticamente imposible reparar una placa base por los aficionados, aunque eso a Apple no le suele importar mucho.
Entre los componentes que encontramos en su interior vemos el A11 Bionic, 3 GB de RAM LPDDR4X de SK Hynix, 64 GB de almacenamiento de Toshiba, un amplificador de audio Cirrus Logic, un transmisor de Qualcomm y el módem LTE Qualcomm Snapdragon X16. Esta última pieza es la que Apple quiere cambiar para los futuros iPhone, y fabricar sus propios módems o que lo haga Intel, para así no tener que depender de la compañía en su eterno litigio legal.
Antes de desmontar el móvil, iFixit ha probado el escaneo de Face ID con una cámara infrarroja, y se ve cómo la función hace pequeños flasheos para intentar detectar nuestra cara.