¿Puedo jugar a 4K en el ordenador por el precio de Xbox One X?

Xbox One X: la consola más potente hecha hasta ahora con 6 TFLOPs

Lo primero que vamos a dejar claro es que sí, se puede, pero no es lo más recomendable. Se puede ajustar el presupuesto en diversos componentes como la caja y la fuente de alimentación, pero al final estamos poniendo en peligro la vida útil, el aspecto y el ruido de nuestro ordenador. Además, hay que tener en cuenta que la propia Microsoft va a perder dinero durante los primeros meses con Xbox One X, vendiéndola por debajo del precio que le está costando fabricarla.

Si Microsoft puede hacer cálculos a largo plazo, nosotros también podemos hacerlo. Por ello, vamos a hacer dos presupuestos de ordenador similares a Xbox One X, uno teniendo en cuenta el precio de la consola y su rendimiento, así como otro teniendo en cuenta el precio del juego online, ya que no sería justo compararlas sin tenerlo en cuenta porque en PC con el precio base ya podemos jugar online de manera gratuita, siendo obligatorio pagar Xbox Live para hacerlo.

Como vemos, el precio final nos queda en 581 euros, sin contar el sistema operativo, que cada uno puede conseguir más barato si compra la clave por separado o decide usar una alternativa libre. La tarjeta gráfica es la versión de 4 GB porque Xbox One X cuenta con 12 GB en total a compartir entre la RAM y la gráfica.

Esta configuración está bastante limitada, y si en realidad nos fuéramos a hacer un ordenador para jugar en 4K sin compromisos, optaríamos por una configuración algo más cara y cómoda. Contando que una suscripción Xbox Live Gold cuesta 60 euros anuales, en un periodo de 5 años (que suele ser la vida útil de una consola a pleno rendimiento con juegos), nos encontramos con un sobreprecio de 300 euros en ese periodo que podemos destinar más cómodamente a elegir mejores componentes para nuestro ordenador. Así, con ese presupuesto, podemos hacerlos el siguiente ordenador.

Como vemos, podemos hacernos un ordenador mucho más equilibrado, que nos va a ofrecer un mejor rendimiento a largo plazo, y con unos componentes de más calidad, así como una caja mejor ventilada y más atractiva. No hemos tenido en cuenta que los juegos de PC son más baratos que los de Xbox One, al igual que no hemos añadido un lector de Blu-ray UHD (en PC se puede jugar y ver películas sin necesidad de usar lector), el coste del sistema operativo o el de los periféricos, donde un combo teclado y ratón nos cuesta unos 20-30 euros, pudiendo añadirlos en lugar de elegir el SSHD.

En resumen, vemos que es claramente posible jugar en 4K por el mismo coste que tiene la Xbox One a largo plazo, y prácticamente similar si tenemos en cuenta el coste a corto plazo. Hay que tener en cuenta también que todavía quedan 5 meses para que salga a la venta Xbox One X (el próximo 7 de noviembre), por lo que para entonces los precios pueden haber cambiado mucho, así como haber salido otros procesadores más eficientes para igualar el precio de la consola, como los Ryzen 3.