Kim Dotcom ha prometido la vuelta de Megaupload y en su momento aseguró que llegaría cumpliéndose el quinto aniversario desde su cierre, es decir, que sería el 20 de enero cuando comenzaría a poder utilizarse el servicio. No se ha cumplido la promesa, pero ya meses antes de que arrancase este año el director del servicio de almacenamiento en la nube comentó que no se podría cumplir con la fecha original. No obstante, hay nuevos detalles sobre las condiciones que se ofrecerán en esta ocasión –para competir con rivales como Dropbox o Google Drive-, y sobre todo las medidas de seguridad que se implementarán.
Ya consiguió en una ocasión revolucionar el mundo entero con el servicio de almacenamiento en la nube Megaupload, y ahora, cinco años después de su cierre por problemas legales, con Megaupload 2.0 pretende volver a conseguirlo. De momento ha arrancado con el pie izquierdo incumpliendo las fechas que se propuso al comienzo, pero ya sabemos que será mucho más seguro, y que se ofrecerán unas interesantes condiciones a los usuarios. De primeras se ha comentado que se asociarán los intercambios con Bitcache para que las transferencias de información sean anónimas, asociadas todas ellas a transacciones de Bitcoin. Este sistema servirá como capa de cifrado adicional en los intercambios, con Megaupload 2.0 como intermediario entre otras plataformas de intercambio de archivos.
Más espacio en Megaupload 2.0 y una capa de seguridad adicional para que las descargas e intercambios se hagan de forma completamente anónima
Esta vez no se utilizarán servidores propios para evitar que puedan ser interceptados, sino que el sistema que anteriormente comentábamos actuará como intermediario en el intercambio por parte de servidores ajenos como los de Maidsafe o Storj, con un límite de almacenamiento máximo de hasta 100 GB en la nube, y sin límite de transferencias de archivos. El mayor problema que se ha anticipado, en relación al uso de Bitcache, es que servirá para promocionar la legitimidad de las criptomonedas, pero también supone un riesgo en tanto que podría volver a asociarse al intercambio y consumo de contenidos protegidos por la Ley.
Según lo descrito por Kim Dotcom a través de las redes sociales, esta vez se evitará la identificación del tráfico de intercambio de archivos entre sus usuarios de dos formas, principalmente: por un lado, eliminando el almacenamiento en servidores reconocidos y aprovechando el de terceros –como los comentados antes-, y por otra parte empleando una capa de cifrado adicional para el intercambio de información entre tales servicios (y sus servidores) y los clientes.