Emulando una de las escenas históricas más famosas de nuestro país cuando Carlos Arias Navarro anunciaba la muerte de Franco por televisión, nosotros podemos afirmar también que la tecnología 3D en los televisores ha muerto. Ya no se trata de conjeturas o de predicciones. La gama 2016 de televisores Samsung, el mayor fabricante mundial y número uno en ventas, no contará con ningún modelo que incluya esta característica.
A principios de 2015 os hablábamos del 3D y la crónica de una muerte anunciada aunque no ha sido hasta este año cuando hemos podido confirmar que ya no habían constantes vitales en el enfermo. El portal de noticias Sam Mobile confirma que Samsung no lanzará nuevos modelos de televisores 3D este año. Esto no hace más que corroborar la anunciada muerte del 3D. Por su parte, otros fabricantes como LG van a recortar el porcentaje de modelos 3D desde el 40% de 2015 a sólo el 20% de la gama en 2016.
Pero ¿por qué es tan importante lo que diga o haga Samsung? La firma coreana acapara más del 22% de la cuota de mercado mundial y en España es el vendedor número de televisores con mucha distancia sobre el segundo. Las decisiones adoptadas por Samsung marcan el ritmo de la industria y el hecho de apostar definitivamente por eliminar el 3D de su gama de televisores es un paso sin vuelta atrás.
En su lugar se apuesta por el UHD, la ultra alta definición y la tecnología HDR, la gran novedad de los televisores que llegan en 2016. No existe demanda de modelos 3D de la misma forma que no existe casi contenido en 3D para aprovechar esta característica. También tenemos televisores curvos cuyas ventajas son defendidas por los fabricantes con vehemencia, aunque en muchos casos se reservan para las gamas más altas.
Tecnología 3D, del todo a la nada en pocos años
En el año 2009 irrumpía con fuerza la tecnología 3D para los televisores domésticos. Tras varios intentos por popularizar esta característica en el pasado, parecía que estábamos ante la definitiva. Todos los fabricantes se pusieron de acuerdo para adoptar esta novedad y se convirtió en un gran reclamo de marketing.
Todas las ferias de tecnologías, las tiendas y demás estaban plagadas de televisores 3D. Era posible coger unas gafas y probar las bondades de la tecnología. Samsung, Sony, LG o Toshiba pusieron en el mercado decenas de modelos con capacidad para reproducir contenido en 3D, siendo la sensación de eventos tan importantes como el CES que se celebra en Las Vegas.
Uno de los primeros problemas con los que se encontró el 3D es el hecho de que cada fabricante apostó por una tecnología diferente. Mientras unos lo hicieron por el 3D activo otros optaron por el 3D pasivo, haciendo que las gafas fueran incompatibles entre unos y otros. Las gafas activas incorporaban su propia electrónica para sincronizar la imagen y mostrarla correctamente. Esto disparaba su precio.
Pero sin duda, el gran problema del 3D fue (y es) la falta de contenido. De igual forma que el 4K está viendo como las plataformas de televisión se vuelcan con esta tecnología, el 3D no vio nada parecido. Netflix, la plataforma más famosa de streaming del planeta, ya ofrece sus películas y series en 4K dentro de su modalidad de suscripción más cara. Además, plataformas como Movistar+ realizan pruebas de manera puntual para emitir en un futuro con esta resolución.
Nada de esto sucedió con el 3D y las ventas no tardaron en reflejarlo. En España sólo 2 de cada 100 teles vendidas era 3D en el año 2012, una cifra que no mejoró demasiado con el paso de los años. Tan grave fue la cosa que en el CES de 2013 empezamos a ver de nuevo propuestas que no incluían esta tecnología aunque ya en 2015 se constató que había desaparecido casi por completo.
Por si fuera poco, el nuevo formato Utra HD Blu-Ray, que llega para sustituir al Blu-Ray actual, no incluye soporte para contenido 4K en 3D. Sí soportará contenido 3D en formato Full HD pero no hay planes más allá de esto. Otro clavo en el ataúd del 3D, por si faltaba alguno por poner.
Samsung no lanzará nuevos televisores en 2016 con soporte 3D, cada vez llegan al mercado menos películas con estas características, las principales plataformas online han pasado directamente al 4K al igual que las cadenas de televisión más importantes, el nuevo formato que llega para sustituir al Blu-Ray (aunque muchos no le den demasiadas oportunidades) no soporta 3D en películas 4K… así podemos buscar una larga serie de motivos para afirmar de forma definitiva: Españoles… las teles 3D han muerto.