El uso de las nuevas tecnologías en todos los ámbitos de nuestra vida ha hecho que aplicaciones como WhatsApp hayan ido sustituyendo antiguos canales de comunicación entre las personas. No obstante en algunos casos, el uso de estas herramientas despierta dudas sobre su legalidad cuando son usadas con propósitos como el comunicar a un trabajador un despido. Vamos a comprobar si las nuevas tecnologías son válidas cuando te echan de tu puesto de trabajo.
Lo primero que hay que preguntarse en el caso de que nuestro jefe nos diga por WhatsApp “estás despedido/a” es si este hecho tiene validez legal. El departamento jurídico de Legalitas informa que este hecho no es legal ya que para que pueda considerarse “válido el Estatuto de los Trabajadores exige que la comunicación se haga por escrito y de manera fehaciente”. Este hecho se realiza mediante la carta de despido acompañada de la correspondiente propuesta de finiquito, algo que en el caso de no producirse dejaría sin efecto dicho despido.
El uso de WhatsApp debido a su inmediatez puede ser útil para comunicar con premura algún suceso importante vía mensaje instantáneo. Pero no obstante, en el caso de un despido laboral debería acompañarse posteriormente mediante la documentación expuesta y a partir de ese momento el trabajador dispondría de los20 días hábiles desde la fecha de despido para reclamar.
Cada vez es más frecuente recurrir a aplicaciones chat como WhatsApp o Facebook Messenger para estar en contacto permanente con los trabajadores, algo que aunque es una gran ventaja para el desarrollo de la actividad profesional, también ha repercutido en restar libertad al empleado fuera de su horario de trabajo.
Las redes sociales pueden generar conflictos en el trabajo
Y es que aunque los expertos legales han restado validez a medios como WhatsApp para comunicar el despido del puesto de trabajo, a veces hay que tener en cuenta que tipo de información publicamos en las redes sociales y si eso puede afectarnos negativamente en el trabajo. Es normal que tanto a la hora de colgar una fotografía en Facebook, en Twitter o simplemente actualizando el estado o la imagen de perfil de WhatsApp, estemos comunicando actitudes o situaciones que pueden ser contraproducentes en nuestro puesto de trabajo.
No son raros los casos en los que personas que aseguran estar de baja médica cuelgan en las redes sociales instantáneas o declaraciones acerca de momentos de ocio que no se corresponderían con el estado de salud que se les presupone. Y es que en ciertos casos, esto puede ser el detonante para que se termine produciendo realmente un despido.