La Ley ha cedido ante la revisión sobre la decisión del Gobierno que permitía copias físicas para uso personal. Según las estimaciones del juez, no hay pruebas suficientes para demostrar que esta ley no tiene un impacto negativo sobre los músicos y, en general, la industria dedicada a la creación de este tipo de contenidos. El problema viene por las quejas de organizaciones dedicadas a la industria.
Tras aprobarse la nueva legislación en octubre, sólo un mes después varias organizaciones solicitaron la revisión judicial de esta ley. Según han explicado, la solicitud de revisión viene justificada por la equivocación del Gobierno, apuntan, en cuanto a la consideración de que esta novedad no dañaría a la industria. Como ya existe en España desde hace años, como alternativa a las copias para uso personal sugieren que se establezca un impuesto sobre los medios como CDs, discos duros, tarjetas de memoria y otros similares.
Así, la conclusión del juez establece que la copia privada en ausencia de un mecanismo de compensación es ilegal. Como consecuencia evidente, el Gobierno de Reino Unido tendrá que modificar la legislación ajustándose a lo establecido por el juez que ha dictado este resultado a la revisión, y mientras tanto las organizaciones involucradas ya han mostrado su satisfacción con el resultado, y aseguran que están dispuestos a la negociación de posibles cambios en la Ley de la mano de los legisladores.
Reino Unido ya no va por delante
La decisión del Gobierno, ahora considerada ilegal por un juez del Tribunal Supremo, posicionó a Reino Unido a la cabeza en la legislación en este campo. La lucha contra la piratería, en los últimos meses, se ha endurecido de forma notable, y de forma especial contra las páginas web que ofrecen enlaces a contenidos protegidos. Con esta modificación, Reino Unido se pondrá a la altura de países como España, y muchos otros en Europa, que mantienen un impuesto sobre medios de almacenamiento.