Correo, facturas, cuentas bancarias… ya son pocas las cosas que no podemos gestionar desde nuestros teléfonos móviles. Las recetas médicas se incorporarán próximamente a nuestros smartphones, al menos para los ciudadanos de Cataluña. Y es que el Servicio Catalán de Salud trabaja en adaptarlas para reducir el consumo de papel y los trámites administrativos.
La administración española presume de su salto al mundo digital pero lo cierto es que todavía queda mucho camino por recorrer. El DNI electrónico es un auténtico quebradero de cabeza para muchos, aunque ha mejorado considerablemente en los últimos tiempos. Las webs de la administración electrónica son poco farragosas e incompatibles con algunos navegadores mayoritarios, pero siempre mejores que las interminables colas para realizar cualquier trámite de forma presencial.
La salud es otro de esos ámbitos que se pone al día con un paso muy lento, al menos en el terreno administrativo. Las recetas en papel son el pan nuestro de cada día aunque algunas comunidades han trabajado para digitalizar el proceso. El último avance nos llega desde el Servicio Catalán de Salud (CatSalut) que trabaja para adaptar las recetas médicas a los teléfonos móviles. El gasto en papel y la reducción de trabajo administrativo son sus principales ventajas.
La receta en el móvil es sólo una parte del portal digital Cat@Salut La Meva Salut, donde los residentes en esa comunidad autónoma podrán acceder a su historial clínico. Actualmente, este portal ya permite consultar el plan de medicación a través de un ordenador, pero pronto estará adaptado para móviles. Se recogerán las pautas de administración y fármacos recetados, evitando así tener que visitar el centro médico.
Según Joan Lluis Piqué, gerente de Atención Ciudadana de CatSalut, se ahorrarán muchas visitas al hospital ya que los pacientes podrán acceder a las recetas desde el teléfono móvil. Esto dará a los profesionales de la salud más tiempo para dedicarse a la atención. Todo se completará con un código de barras digital que eliminará la necesidad de la receta en papel para dispensar fármacos.
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